Las fuertes lluvias cayeron en parte del sur de Gran Buenos Aires y otras zonas del área metropolitana. Una de las ciudades más afectadas fue La Plata, con un tercio de las precipitaciones que cayeron el trágico 2 de abril de 2013.
En la Ciudad cayeron más de 1500 milímetros de agua entre la madrugada y las cuatro de la tarde, y la zona más afectada fueron las localidades de Etcheverry, Abasto, Olmos, Villa Elvira, Arana, San Lorenzo y El Peligro, Berisso y Los Hornos.
La ciudad que fue construida sobre cientos de hectáreas de humedal, hoy tiene a estos ecosistemas en extinción que son reemplazados por inmobiliario. Especialistas destacan que los humedales son fundamentales frente a un contexto de cambio climático
“Albergan y son refugio de una gran diversidad de especies; almacenan y purifican el agua; y cumplen un rol esencial en el control de inundaciones, ya que reducen la velocidad de circulación de las aguas en época de crecida. Además, actúan como barreras ante los efectos de las tormentas y controlan la erosión costera”, dice Jezabel Primost doctora en Ciencias Exactas e integrante de Centro de Investigaciones del Medioambiente, (CIM), UNLP-CONICET
Organización vecinal
Una de las zonas más afectadas por la tormenta fue Los Hornos, uno de los barrios más grandes de la ciudad que es atravesado por un arroyo. Las casas aledañas fueron tapadas hasta los tobillos de agua gracias a la inexistencia de obras hidráulicas y el relleno de humedales en los últimos años para nuevas construcciones.
Lugares como el Reservorio Arroyo Regimiento ubicado en Avenida 137 entre 70 y 72, fueron conservados y ayudó como barrera frente a las inundaciones del pasado jueves.
“El Reservorio está a tope, está funcionando, logro de nuestra asamblea vecinal. Esperemos siga así ya que la tormenta continúa. Es necesario continuar exigiendo obras, para no volvernos a inundar. Lamentablemente la situación actual frente al cambio climático es muchísimo más grave que hace 10 años”, publicó la página oficial del Parque.
El Parque funcionó como basural muchos años hasta que la asamblea vecinal exigió la preservación del lugar como Parque Recreativo y humedal urbano. Aunque el municipio se comprometió con las obras, desde el 2019 se están esperando. El lugar es mantenido por los y las vecinas, quienes aseguran que el humedal cumple su función frente a grandes lluvias.
La mayoría de las luchas por la preservación de los humedales nacen de una organización vecinal. Tal es el caso del barrio Garibaldi con el Arroyo “El pescado”, quienes lograron frenar las obras que se estaban realizando sobre la superficie inundada del humedal a través de un fallo de la Justicia platense que dio lugar a la demanda de la Comuna.
La medida cautelar fue hacia el municipio e “incluye un pedido de recomposición, no solo que se frenen las maquinarias y los trabajos en la zona, sino que se pida una recomposición de todo lo que se destruyó”, dijo uno de los vecinos en una nota para Radio la Plata.
La lucha por los humedales no es solo ambiental, sino social
Berisso fue otra de las localidades más afectadas por las fuertes lluvias, a causa de precarias obras hidráulicas y supresión de reservorios de agua que son fundamentales para mitigar inundaciones, como el bañado de Maldonado, adjunto a un arroyo con el mismo nombre que dejó a la zona del Carmen con familias evacuadas.
Según Julio Milat, titular del Museo Ornitológico y Centro de Interpretación Ambiental (MOCIA) en Berisso se han extinguido los humedales como el de la Isla Paulino que “50 hectáreas fueron rellenadas con refulados contaminados con hidrocarburos para la Terminal de Contenedores del Puerto La Plata”, cuenta el especialista en el tema de humedales. Las zonas claves que la ciudad aún tiene y que debe preservar son “el humedal del Maldonado y el cuadrado que va de Villa Arguello a Villa Nueva y de la 66 a la Avenida del Petróleo”, dijo a ARG Medios.
Según Milat, “los humedales son ecosistemas que permanecen con sus suelos inundados o en condiciones de anegamiento durante largos periodos de tiempo. Son reservorios de agua dulce que cumplen la función de almacenar agua y que son útiles frente a sequias o inundaciones”. Sin embargo, son tomados como sitios vacantes e improductivos y donde avanzan los imprendimentos inmobiliarios y barrios cerrados.
Hace 68 no ocurría una lluvia de tal magnitud en el mes de agosto, y la principal forma de combatirlo es con obras hidráulicas como las tiene Ensenada quien registró menos de 5 familias evacuadas, frente a la ciudad de Berisso que cuenta con similares condiciones geográficas y terminó con 300 familias evacuadas.
Ante la falta de estas y por razones estructurales, los humedales resultan espacios estratégicos para hacerle frente al problema de las inundaciones. La importancia de una Ley de Humedales que regule el 20% de estos ecosistemas que existen en Argentina es una deuda de nuestra democracia; con más de 15 proyectos presentados desde 2013 y un fallo de la Justicia a favor del cuidado de los humedales en 2019, no hay dudas que se trata de una problemática fundamental para el buen vivir de las comunidades.