Mediante el Decreto 193/2024, el presidente Javier Milei acompañado de las firmas del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, ordenó el desfinanciamiento del Fondo de Integración Socio Urbana (FISU) que pasara de recibir el 9% del impuesto PAIS a solo el 0,3%.
El decreto fue publicado el día de hoy en el boletín oficial: “Al FONDO DE INTEGRACIÓN SOCIO URBANA (FISU), creado por el Decreto N° 819 del 5 de diciembre de 2019 en el marco de la Ley N° 27.453 de Régimen de Regulación Dominial para la Integración Socio Urbana y sus modificatorias, para el financiamiento de obras de vivienda social: el UNO POR CIENTO (1 %)”.
Este 1% no es sobre el total de lo recaudado del impuesto PAIS, sino sobre el 30% de acuerdo a los establecido por la ley 27541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en el Marco de la Emergencia Pública aprobada en febrero del 2020, ni bien adentrado el gobierno de Alberto Fernández.
Este desfinanciamiento se da en el marco de un fuerte asedio mediático sobre el destino del FISU y la gestión de la catequista y militante social, Fernanda Miño, que durante el periodo 2020 – 2023 estuvo al frente de la Secretaría de Integración Socio Urbana (SISU). Los informes periodísticos de Clarín y La Nación se basaban únicamente en el testimonio anónimo de “altos funcionarios” de SISU. Estos informes sostienen que el FISU funcionó como “caja propia” del dirigente político Juan Grabois, que la mayor parte de las obras fueron asignadas a cooperativas vinculadas a la UTEP, y que la mayor parte de la planta del organismo eran “militantes de Grabois”.
FIN DE LA OPERETA
El gobierno desmiente los titulares de La Nación y Clarín, que tendrán que responder en la justicia. pic.twitter.com/Ccdhw2ngU3
— Fer Miño (@ferminook) February 22, 2024
No obstante, durante una entrevista radial, el actual subsecretario de Integración Socio Urbana, Sebatián Pareja, comentó: “Hay muchas noticias que nosotros no hemos podido verificar. Grabois, no tenía un rol específico porque nunca fue funcionario del área”, desligando de esta manera el rol del dirigente social. Sobre la obras, Pareja declaró: “El resultado efectivo a los barrios populares llegaba. En este poco tiempo que llevo yo, he hablado con intendentes de diferentes signos políticos, y hasta ahora no he encontrado críticas. Si no fue la única secretaria que funcionó en la gestión anterior, le pega en el palo.”
Durante toda la semana, Miño ha recibido el apoyo de periodistas y referentes políticos, sumado a un comunicado del bloque de diputado de Unión por la Patria. Ante el reciente desfinanciamiento del FISU, Miño reaccionó en sus redes: “La operación berreta que hicieron algunos “periodistas” muy amigos del gobierno, intentando ensuciar al FISU, tenía como objetivo decirle a la gente que están ajustando una “caja de la política” cuando lo que están haciendo es desfinanciar la obra pública en los barrios”.
Luego agregó: “Si querían controlar más, aunque fuera difícil porque nosotros controlamos MUCHO, podían poner más controles. Pero no, lo que quieren es dejar de invertir en cloacas, agua, electricidad, calles, veredas y mejoramientos habitacionales para la gente”. Se espera la respuesta de la Mesa Nacional de Barrios Populares, cooperativas de construcción y organizaciones sociales que ven esta medida con mucha preocupación.