A los 80 años, falleció el ex coronel del Ejército Ernesto Guillermo Villarruel, tío de la actual vicepresidenta Victoria Villarruel. El militar retirado, quien no llegó a ser juzgado por su implicación en los crímenes cometidos en el Centro Clandestino de Detención (CCD) El Vesubio, en La Matanza, murió sin enfrentar el juicio debido a sus problemas de salud.
Villarruel fue detenido en 2015 mientras se disponía a votar en las elecciones y procesado ese mismo año. Sin embargo, el 29 de diciembre de 2016, el juez Daniel Rafecas lo declaró incapaz para ser juzgado y defenderse de las acusaciones por las que se lo señalaba.
Entre las imputaciones que pesaban sobre él se encontraban su participación en operativos ilegales orientados a la privación ilegal de la libertad de las víctimas, así como su posterior traslado a centros clandestinos de detención durante la dictadura militar.
El rol de Villarruel en el CCD El Vesubio no fue menor: se desempeñaba como Jefe de la División II de Inteligencia del Regimiento de Infantería 3 de La Tablada, y tenía una oficina en ese centro clandestino, que fue uno de los más notorios en la represión durante la última dictadura cívico-militar.
De los once acusados en la causa de El Vesubio, ocho fueron condenados, entre ellos Roberto Horacio Aguirre, Humberto Eduardo Cubas, Florencio Esteban Gonceski y Eduardo David Lugo. Las condenas fueron por delitos de lesa humanidad, lo que incluyó secuestros, torturas y desapariciones forzadas.
Ernesto Villarruel era también hermano de Eduardo Marcelo Villarruel, quien participó en el Operativo Independencia, la campaña militar lanzada en 1975 contra la guerrilla en la provincia de Tucumán, antes del golpe de Estado de 1976.
Eduardo Marcelo es el padre de Victoria Villarruel, actual vicepresidenta de la Nación y férrea defensora de los genocidas involucrados en la represión de los años 70.
