En solo seis meses, Milei destruyó 10 mil PyMES argentinas

Desde la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino sostuvieron que el "experimento libertario" está destruyendo 50 pymes por día en la Argentina.

La Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino – ENAC – denunció que en 6 meses Javier Milei y Luis Caputo destruyeron 10.000 empresas pymes en la Argentina.

Según el informe de la entidad que se reclama la representación de “las empresas que viven del mercado interno”, la desaparición de ese número de empresas desde diciembre de 2023 se dio en el marco de una consolidación de la “recesión y un desplome económico similar al del año 2020”.

Los datos, aseguran, se sustentan en informes que arroja el INDEC que consolida una recesión y un desplome económico similar al del año 2020, los despidos generalizados en el sector privado informados por la Secretaría de trabajo de la Nación, la información que publica el BCRA con 350.000 cuentas sueldos menos, la información de la AFIP y la información de Radar PYME.

En ese sentido, advirtieron al Congreso de la Nación y al Gobierno Nacional que este no era el camino para salir de los problemas de la Argentina, no escucharon, y ahora el daño está hecho.

“Este experimento libertario está destruyendo 50 pymes por día en la Argentina, sin plan ni rumbo económico que genere certidumbre sobre el clima de negocios para poder desarrollar nuestra actividad económica en paz” expresaron. 

Al tiempo que aseguraron que “destruir pymes es destruir la base del patrimonio nacional para volver a ser colonia extranjera” y agregaron que “la pobreza y el subdesarrollo de nuestra patria es proporcional al desarrollo y la riqueza de los países que por medio del endeudamiento se apropian de nuestros recursos naturales y el talento argentino”.

Por último, criticaron la Ley Bases y expresaron que “creer legislar para el capital extranjero o promover pactos refundadores y grandes alquimias economicistas puede maquillar la pobreza, el desempleo, la caída del poder adquisitivo, por un lado, y por otro ocultar el verdadero saqueo del erario público que están volviendo a estructurar con la deuda externa y la entrada a través del RIGI a fondos buitres y especulativos para volver a robar nuestros recursos naturales como hace 200 años”.