El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, logró imponerse en las PASO con el 36,41% de los votos, mientras que la interna de Juntos por el Cambio se resolvió a favor de Néstor Grindetti ante Diego Santilli por diferencia de tan solo 20 mil votos.
Aunque las dos fórmulas de Unión por la Patria a nivel presidencial se impusieron en la Provincia de Buenos Aires lo hicieron con el 32 por ciento de los votos.
La diferencia de porcentajes entre Kicillof y los precandidatos a presidente por Unión por la Patria en territorio bonaerense indica que existió un corte de boleta acentuado. En 93 municipios se cortó a favor del gobernador siendo de 7,7 por ciento el corte favorable a Kicillof.
El actual gobernador logró una buena performance en casi toda la Provincia de Buenos Aires, con mayor presencia en el conurbano. Mientras que Juntos recuperó terreno en el interior y La Libertad Avanza logró ser la fuerza más votada en un solo distrito.
Carolina Piparo no pudo retener todos los votos de Javier Milei aunque logró ubicarse en el tercer lugar de la Provincia de Buenos Aires con 24 por ciento de los votos.
Días previos a las elecciones, intendentes le informaron a Kicillof y a Sergio Massa que las encuestas le estaban dando 50-30-20. Todo se confirmó. Las gestiones locales lograron retener los municipios aunque poco se tradujo para el gobernador Kicillof y menos a los presidenciales de Unión por la Patria.
Así fue que en el conurbano se lograron imponer los intendentes de Unión por la Patria. Solo 5 distritos quedaron el poder de Juntos por el Cambio, todos en zona norte y oeste: Vicente López, San Isidro, Tres de Febrero, Morón y San Miguel.
En Moreno, las tres fórmulas para intendente lograron el 52,54%, mientras que Kicillof obtuvo 46 y Massa 40. En José C Paz, la fórmula a intendente obtuvo 40 por ciento, mientras que Kicillof 42 y los presidenciables 37,5 por ciento.
En Florencio Varela, Andrés Watson sacó 44,12%, Kicillof 45 y a nivel nacional 40 por ciento. En Luján, el intendente local superó el 50 por ciento, mientras que el gobernador se plantó en 34 por ciento y las dos fórmulas presidenciales arañaron el 32 por ciento.