Organizaciones sociales contra el hambre: “No hay señales de que quieran solucionar el problema alimentario”

Con diferentes campañas y consignas, los movimientos sociales apelan a la organización comunitaria para enfrentar el hambre. Las responsabilidades del gobierno y el camino a la marcha de San Cayetano.

Aunque todas las estimaciones (centralmente la de la UCA) indican que más de la mitad de los argentinos son pobres, y casi un 20% viven en la indigencia, el gobierno nacional sigue reteniendo toneladas de alimentos en extensos galpones. Entrega a cuenta gotas, por presión judicial. No compra, no renueva convenios, no presenta informes, no presenta un plan de reparto. Por el contrario, sigue apelando fallos judiciales y se aferra a su relato sobre comedores fantasmas y lotes para emergencias climáticas. La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, no atiende ni acata a la justicia.

El juez en lo contencioso administrativo federal, Martín Cormick, había dispuesto el pasado martes que la cartera de Pettovello informe en un plazo máximo de 48 horas cómo garantizará la distribución de alimentos para las personas que concurren a comedores. Lejos de acatar la medida, la ministra apeló el fallo. A casi un mes del escándalo por los galpones de Tafi Viejo y Villa Martelli, Argentina aún sigue discutiendo como llevar un plato de comida a una mesa.

“Hay dos causas. Una es una denuncia penal que hicimos a través de la Asociación Civil Amanecer de los Cartoneros con Juan Grabois como abogado y Nicolás Rechanik también acompañando. Después hay un amparo contencioso administrativo que solicita retrotraer la situación de programas alimentarios a diciembre del año pasado. Es decir, que siga asistiendo lo que se estaba asistiendo y en la misma cantidad. Ambas causas están todavía en ejecución” explica Nicolás Caropresi, referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) nucleado en la UTEP.

Capital Humano ya apeló tres veces a diferentes solicitudes que hicieron los jueces en diferentes instancias de la causa penal. En realidad, se trata de la misma solicitud: presentar un cronograma de la entrega de los alimentos y la logística para hacerlo. “Han enviado algunos informes de que mandaron alimentos a tal lado y a tal otro, pero no están ni presentando un cronograma ni algo que demuestre la entrega de todos los alimentos que tenían en los galpones” comenta Caropresi.

La ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, no atiende ni acata a la justicia.

Tampoco hay respuesta sobre nuevas compras para la renovación de los convenios. No hay señales de que en la cartera de Pettovello estén intentando resolver la situación alimentaria y abastecer la red de comedores comunitarios más grande: las organizaciones sociales. “No hay que olvidar que en el fondo, más allá de las organizaciones, lo importante es la asistencia a personas que realmente necesitan de este alimento” explica el referente de la UTEP y agrega “resoluciones positivas hubo en todas las instancias judiciales. En la instancia penal, el juez le solicitó el cronograma. No lo hicieron, presentaron amparo, ahora dicen que van a recurrir a la Corte Suprema. Todo esto para no avanzar en la entrega de los alimentos o en un cronograma de entrega de alimentos. Y en lo contencioso administrativo, unos días antes de la feria, salió una resolución que tenía que retrotraer la situación a diciembre, de eso no hubo novedades”.

Las organizaciones sociales son las que reciben la demanda de los territorios. Escenas de violencia y verdadera implosión social son las que viven día a día. Ante esta situación, deciden no quedarse con los brazos cruzados y avanzar en campañas solidarias y de denuncia. Caropresi nos explica la campaña “Ningún pibe con hambre”: “nosotros nos vamos organizando en pedir donaciones, en ir a buscar al Mercado Central, en hacer rifas para juntar plata y sobre todo en el MTE estamos organizando una campaña de donaciones para suplir esos fondos y esos alimentos que antes venían de Nación y así poder seguir garantizando la mayoría de los espacios que han ido cerrando o que han bajado la frecuencia con la que asistían a las personas”.

Por su parte, desde el conjunto de organizaciones comunitarias nucleadas en Chicos del Pueblo, se reactiva la consigna “el hambre es un crimen”. El pasado 13 de julio protagonizaron una verdadera movilización de las infancias a la Republica de los Niños, el icónico espacio de esparcimiento fundado en el primer peronismo. Claudia Bernazza, referente del espacio, nos comenta: “somos organizaciones comunitarias que vivimos en la cotidianeidad en hogares de pibes, en clubes de barrio y otros tipos de organización que abren sus puertas a pibes y pibas para llevar adelante proyectos de vida en marco de educación no formal. También brindamos servicios alimentarios y servicios de salud. Son respuestas barriales a la vida de los chicos y los adolescentes. De hecho, en Chicos del Pueblo hay jardines comunitarios, centros juveniles, casas del niño que los van acompañando a lo largo de su vida”.

“’El hambre es un crimen’ no es una campaña, es una consigna histórica del movimiento nacional de los Chicos del Pueblo que denunció tanto en la primera democracia luego de la dictadura como durante el neoliberalismo. Denunció un Estado que se retiró. El ajuste que se está haciendo sobre las familias más humildes y el tema de que en nuestro país haya tantas familias que pasan hambre hizo que volvamos a denunciar con fuerza el problema de la falta de alimentación en nuestros barrios” agrega Bernazza.

Desde Chicos del Pueblo también se avanzó en acciones legales que no obtuvieron respuestas hasta ahora. “Nosotros presentamos ante la Defensoría Nacional de Niñez un pedido para denunciar el corte de los programas sociales y, en general, la situación que ha traído en los barrios el ajuste. Pero nuestra mayor actividad está en las marchas y en nuestra expresión en la calle y en estas expresiones que hacemos para reclamar por un modelo económico que no ajuste sobre los más pobres” explica Bernazza.

“Estamos tratando de organizar, como todos los años, la manifestación del 7 de agosto que está centrada en la paz, el pan, el techo, el trabajo, la tierra, pero centrándonos en que no puede ser que a siente meses de asumido este gobierno con la cantidad de gente solicitando asistencia en la mayoría de nuestros comedores el gobierno siga dilatando esta discusión y queremos convertir en el centro del 7 de agosto esta discusión”, comenta Caropresi. En este contexto, la instalada Marcha de San Cayetano que se realiza todos los 7 de agosto, puedo cobrar una gran relevancia y transformarse en una nueva movilización masiva contra el gobierno.