El presidente Alberto Fernández le imprimió un verdadero suspenso a la Cumbre de las Américas que tendrá sede en Los Ángeles (EEUU), del 6 al 12 de junio de este año. Sucede que luego de que el presidente norteamericano, Joseph Biden decidiera excluir a Cuba, Nicaragua y Venezuela de la Cumbre, algunos países anunciaron que no participarían si se daban esas graves censuras.
La voz más decidida fue la del mandatario mexicano, Manuel López Obrador, pero más tarde el propio jefe del Estado argentino se sumó a la negativa de participar de la Cumbre si Estados Unidos no desistía de su polémico planteo.
Lo cierto es que desde la Casa Rosada no surgió ningún comunicado oficial hasta entonces y todo se manejó como un rumor. Más tarde, el presidente argentino y el mexicano tuvieron una conversación para definir la estrategia y finalmente, Alberto Fernández esbozó una dura crítica como el titular de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
Allí Fernández criticó la postura de Estados Unidos, que hasta ahora se mantiene firme en excluir a esos tres países por “no respetar la democracia y los Derechos Humanos”. Al mismo tiempo, luego de las declaraciones del presidente argentino, corrió el rumor de una posible Cumbre paralela a la de las Américas, oficiando así de una verdadera “contracumbre”, que rápidamente trajo el recuerdo del “No al ALCA” en 2005, durante la Cumbre de las Américas que se realizó en Mar del Plata, Argentina.
Sin embargo, horas más tarde la idea de una contracumbre fue desmentida por las autoridades de Cancillería Argentina. “Si un país no quiere asistir, pues ya ese es su derecho, pero ¿cómo una cumbre es de América sin todos los países de América? ¿De dónde son los no invitados? ¿Son de otro continente, de otra galaxia, de un planeta no conocido?”, manifestó la semana pasada el presidente mexicano.
En tanto, si bien de parte del gobierno argentino no se ha profundizado las relaciones con los gobiernos de Nicaragua y Venezuela, lo cierto es que la posición de gobierno de Alberto Fernández se mantiene con la lógica de “no intervención en asuntos exteriores” y al mismo tiempo, al representar la presidencia pro témpore de la CELAC, tiene la obligación de plantear reparos para que en la Cumbre de las Américas ningún país se quede afuera.
“La posición de Argentina es clara. Argentina también ejerciendo la presidencia ‘pro tempore’ de la Celac viene marcando la necesidad de una cumbre sin exclusiones”, expresó el Canciller argentino, Santiago Cafiero, tras la reunión que sostuvo en la Ciudad de México con el canciller mexicano Marcelo Ebrard.
Argentina, va
Pero pese a la presión que presentaron tanto México como Argentina, finalmente el presidente Alberto Fernández habría decidido participar de la Cumbre de las Américas que se realizará del 6 al 12 de junio en Los Ángeles, California.
Este medio se quiso comunicar con fuentes de Cancillería pero no dieron respuestas, por lo que se especula que todavía el gobierno prepara un discurso hacia afuera. Es que la postura diplomática del país no será sencilla durante la Cumbre en Estados Unidos: allí deberá representar a la CELAC y denunciar la exclusión de Cuba, Nicaragua y Venezuela.
Pero al mismo tiempo, tendrá que dar explicaciones de su participación a los países excluidos, luego de haber amagado con faltar y aguar la Cumbre de Biden.
