Este miércoles 7 de septiembre, Brasil conmemoró su bicentenario. Lejos de haber sido una fiesta nacional, la fecha fue utilizada por el jefe del Ejecutivo como uno de los actos de su campaña a la reelección, con la presencia exclusiva de militantes y simpatizantes bolsonaristas.
Tras un discurso breve en Brasilia frente a miles de simpatizantes y sin la presencia de los jefes de los otros poderes, Bolsonaro dejó de lado la importancia histórica de la fecha patria que se conmemoraba y se dirigió a su base: “Somos una patria mayoritariamente cristiana que no quiere la liberación de las drogas, que no quiere la legalización del aborto, que no admite la ideología de género”.
El presidente también instó a sus seguidores a “convencer a los que piensan diferente de nosotros, vamos a convencerlos de lo que es mejor para Brasil”. Tras su llegada a Río de Janeiro, el presidente se dirigió a la playa de Copacabana, donde una multitud le rendía culto a su figura y dónde discursó contra el ex presidente Lula, a quien llamó “el bandido de nueve dedos”.
Si bien durante la jornada se pudieron apreciar las tradicionales maniobras de la Aeronáutica, Marina y Ejército, tanto en Brasilia como en Río de Janeiro, el protagonista de la jornada fue el presidente y candidato a la reelección, quien omitió cualquier mención al bicentenario de la independencia.
Las imágenes de la jornada. Por Florencia Urbani para ARG Medios.
