El 1º de enero, el presidente colombiano Gustavo Petro anunció por decreto un cese bilateral al fuego por seis meses con la guerrilla del ELN y cuatro grupos armados más, lo que generó una gran expectativa entre la población. Este anuncio encajaba al dedillo con el llamado a la “Paz Total”, uno de las políticas que más importancia le está dando a su gestión.
Pero luego del anuncio, el Ejército de Liberación Nacional salió rápidamente a desmentirlo, lo que dejó a Petro en un lugar incómodo, y fue leído como un paso en falso. Esta situación puso en crisis los diálogos que habían comenzado el 12 de diciembre pasado.
En el comunicado el ELN advertía que “no puede aceptar como bilateral una decisión unilateral del Gobierno”, y que anuncios de ese estilo no podían salir de la formalidad de la mesa de diálogos, y que “viola los procedimientos de no difundir a la opinión pública lo que no sea de consenso”. El error cometido por Petro puso en duda por un instante la continuidad de los diálogos y generó una alarma tras el comunicado del ELN.
Luego de este fallido, Gustavo Petro convocó una reunión extraordinaria con integrantes de su gobierno para derogar el decreto, y aclaró que la propuesta de un cese al fuego fue una mera “intención” para avanzar en el entendimiento y en un nuevo futuro.
Superada esta crisis el gobierno y el ELN sostuvieron este 17 de enero una reunión extraordinaria para retomar las conversaciones y dejar atrás la situación que habían generado las palabras del presidente Colombiano. El escenario esta vez fue Caracas, la capital Venezolana, el mismo lugar donde se realizó la primera ronda de conversaciones que culminó el pasado 12 de diciembre de 2022. Finalmente, en este último encuentro se acordó que la mesa de negociaciones para continuar el proceso de los diálogos de paz sean el 13 de febrero.
De este encuentro en Caracas según las palabras de la senadora María José Pizarro, del Pacto Histórico, subrayó que “en nuestro criterio, tres objetivos son fundamentales: reafirmar nuestra voluntad de paz, afinar los mecanismos de trabajo y de comunicaciones entre ambas delegaciones -en especial entre los ciclos de diálogos-, y en tercer lugar, lograr avanzar en el cese bilateral al fuego”.
A su vez, se anunció que este mismo miércoles comenzó una caravana humanitaria conformada por cerca de 100 personas que recorrerá distintos puntos del país para recoger información en los territorios sobre la situación de los derechos humanos y evaluar en qué condiciones se encuentran las comunidades desplazadas como consecuencia del conflicto armado.
La caravana es parte de los acuerdos de la mesa diálogos y es el primer gesto concreto después de lo que se anunció en el cierre del primer ciclo de conversaciones del pasado 12 de diciembre.