Yaku Pérez y su conexión con la derecha ecuatoriana

Se define la segunda vuelta electoral y Guillermo Lasso obtiene una ventaja mínima sobre el candidato del partido Pachakutik. Pérez denuncia fraude y empieza a definir sus próximos pasos. Se abre un nuevo escenario de cara al balotaje.

Por Ana Dagorret

El domingo pasado se celebraron elecciones en Ecuador. Los primeros resultados dejaron al ambientalista Yaku Pérez muy cerca de la segunda vuelta de las presidenciales. Líder de la organización indígena Pachakutik, que actúa como el brazo político de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Pérez se presenta como un progresista defensor del agua y la naturaleza. Sin embargo, sus posiciones políticas lo encontraron cerca de la derecha ecuatoriana en más de una oportunidad. 

Abogado de 51 años y con formación académica en derecho ambiental y cuencas hidrográficas, comenzó su recorrido en la política en el año 1994 en la provincia de Azuay, al sur del país. 

Yaku Perez no siempre fue conocido de esa manera. Fue en 2017 que decidió cambiar su nombre original (Carlos) por Yaku porque manifestó querer la “descolonización de los nombres” al tiempo que afirmó querer ser coherente con su lucha por la defensa del agua y el medio ambiente.

Férreo opositor a Rafael Correa durante la gestión del ex presidente, con el tiempo logró proyección regional dentro del movimiento indígena y llegó a presidir Ecuarunari —la organización más importante dentro de la CONAIE—  en dos oportunidades, entre 2013 y 2019.

En el año 2019 logró elegirse prefecto de la provincia de Azuay, cargo al cual renunció para presentarse en las presidenciales como el candidato de Pachakutik. Con las manifestaciones de octubre en oposición a las medidas adoptadas por el gobierno de Lenin Moreno, el movimiento indígena ganó fuerza política, lo cual parece reflejarse en el apoyo a la candidatura de Pérez.

En su campaña para presidente, el candidato indigenista se refirió en una entrevista a los hechos de octubre de 2019, cuando la represión del gobierno dejó un saldo de 11 muertos, 1.340 heridos y 1.192 detenidos. Consultado acerca de si investigaría las muertes a manos de la policía, declaró que “no lo hará porque no busca venganza”.

En la misma entrevista, Pérez manifiesta no ver con malos ojos la implementación de un plan de austeridad que implique la reducción del Estado y sus consecuentes despidos en masa. A su vez, más allá de presentarse como un ambientalista, Perez no se opone a la continuidad del extractivismo y afirma que de llegar a la presidencia no romperá contratos con petroleras y empresas mineras.

En enero de este año el financiamiento de Pachakutik fue cuestionado públicamente. Según contó el ex dirigente del partido Fausto Rangeles en una entrevista, el brazo político de la CONAIE recibe dinero de ONGs como la fundación Pacha Mama, financiada por la National Endowment for Democracy (NED). Esta organización está vinculada a la CIA y a USAID y tiene como objetivo contribuir a la lucha anticomunista.

En ese sentido, las posturas adoptadas por el ahora líder indígea en relación a otros líderes políticos de la región van en la línea del NED. Perez ha llegado a referirse a la persecución judicial sufrida por la ex presidenta de Brasil Dilma Rousseff tras el golpe parlamentario que la destituyó como un triunfo de la lucha contra la corrupción. Las mismas palabras fueron utilizadas para atacar a Cristina Kirchner y Nicolás Maduro.

Pérez llegó inclusive a afirmar que el ex presidente boliviano Evo Morales cometió fraude durante la elección de 2019. En ningún momento se manifestó acerca de las reiteradas violaciones a los derechos humanos cometidas durante el gobierno de facto de Janine Añez en ese país, así como tampoco se refirió a la situación de ninguno de los países latinoamericanos donde gobierna la derecha.

El candidato de Pachakutik fue una de las sorpresas de las elecciones y llegó a posicionarse para una segunda vuelta, tendencia que se revirtió en las últimas horas en favor del banquero Guillermo Lasso. Pérez denuncia que “se consumó el fraude” y no sólo responsabiliza al Consejo Nacional Electoral sino que acusa de manipulación al propio Rafael Correa, que vive en Bélgica hace más de tres años .

De confirmarse el ingreso de Lasso al balotaje se abre un nuevo escenario en Ecuador. En un comunicado emitido este miércoles, Pachakutik convocó a sus bases, a las organizaciones sociales y a la ciudadanía a una movilización nacional para defender sus votos. Mientras tanto, el candidato Xavier Hervas, que salió cuarto en las elecciones del domingo, llamó a un acuerdo “anti-correista”.

Ya en el año 2017, Lasso disputó una segunda vuelta con Lenin Moreno, por entonces candidato de Rafael Correa. En esas elecciones, Yaku Pérez manifestó su apoyo a Lasso argumentando que “es mejor un banquero que un dictador”. De repetirse este apoyo, la incógnita es cuál será el acatamiento de su base electoral.