Desde el triunfo de Javier Milei en el balotaje frente a Sergio Massa, el gobernador de la Provincia de Buenos Aires puso los cañones de lleno en la coparticipación que recibe su distrito.
Durante la campaña electoral, Javier Milei criticó el régimen de coparticipación y propuso eliminarlo, aunque luego reconoció que eso es prácticamente imposible en la práctica. Ante ello, el mandatario bonaerense salió a reclamar lo que es de la Provincia de Buenos Aires.
Pero el pronunciamiento de Kicillof no es nuevo, durante el 2022 también discutió de la mano del gobierno del Frente de Todos discutió el incremento del coeficiente de coparticipación a la Ciudad de Buenos Aires, de 1,4% a 3,75%, por el traspaso de la policía, realizado por Mauricio Macri.
“La provincia de Buenos Aires es la más perjudicada en materia de coparticipación, aporta cerca del 40% de los fondos y recibe apenas el 22%”, fue el último mensaje de Kicillof sobre el tema.
También aseguró que “en proporción a la cantidad de habitantes que tiene” –unos 17,5 millones según el último censo- Buenos Aires es la provincia “que menos gasta y que menos empleados públicos tiene”.
Buenos Aires es la provincia con mayor peso económico dentro del país: concentra casi el 40 por ciento de la población del país y explica el 35 por ciento de Producto Interno Bruto, el 40 por ciento de la recaudación de impuestos coparticipables, el 36 por ciento de las exportaciones y el 50 por ciento del valor agregado industrial.
Durante su última declaración, Kicillof expresó que durante el segundo mandato al frente de la provincia sostendrá el “compromiso” de “seguir defendiendo el aparato productivo” por medio del “crédito, la obra pública y la infraestructura”.
