El gobierno de Javier Milei profundiza el proceso de desmantelamiento del sistema científico y tecnológico nacional. A través de la Resolución 10/2025, la Jefatura de Gabinete ha encomendado a la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación una evaluación exhaustiva de los programas creados por el ex Ministerio del área, con el objetivo de eliminar aquellos que no se alineen con los intereses del oficialismo.
La medida establece que solo continuarán las investigaciones que estén “al servicio del crecimiento económico y desarrollo estratégico del país”. Este criterio restrictivo pone en jaque un vasto abanico de proyectos esenciales que hasta ahora impulsaban avances en ciencias sociales, medio ambiente y cambio climático, entre otros.
Recorte presupuestario y eliminación de programas
La resolución argumenta que el ajuste responde a una “crisis económica y financiera inédita” y a la necesidad de “eliminar gastos innecesarios” para priorizar las “reales y urgentes necesidades de la población”.
En este marco, Darío Genua, titular de la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación, cuenta con la potestad de evaluar y dar de baja programas, renegociar convenios e incluso modificar los montos asignados en función de las partidas presupuestarias disponibles.
El recorte afectará $1.867 millones destinados a investigación, impactando directamente a 70 programas sociales que, según el gobierno, no cumplen con un “grado de pertinencia y aporte efectivo al desarrollo”. Desde la Secretaría, algunos medios oficialistas justificaron la decisión asegurando que esos proyectos “no son prioritarios”.
Rechazo y alarma en la comunidad científica
La medida generó un fuerte repudio de la Federación de Docentes Universitarios (FADUN), que alertó sobre las graves implicancias de esta política. En un comunicado, señalaron que la resolución implica “la eliminación de las investigaciones científicas relacionadas con las ciencias sociales, el medio ambiente y el calentamiento global, entre otras áreas fundamentales”.
FADUN también realizó un llamado urgente a “la comunidad universitaria, científica y al conjunto de la sociedad a mantenerse alerta y movilizada en defensa de la educación pública, la ciencia y la tecnología”.