Trump en modo motosierra: ordenó desmantelar el Departamento de Educación

El magnate había acusado al organismo estatal de estar “contaminado por la ideología progresista”. A pesar de que la eliminación total requiere la aprobación del Congreso, el presidente estadounidense ya recortó su plantilla a la mitad y canceló múltiples subsidios y contratos. Elon Musk lo celebró con un meme provocador.

El ataque a la educación pública no es sólo patrimonio de Javier Milei. Su máximo ídolo, Donald Trump, firmó este jueves un decreto para desmantelar el Departamento de Educación, cuyas funciones quedaron reducidas a la mínima expresión ante la imposibilidad de cerrarlo completamente ya que es una atribución del Congreso.

Fiel a su estilo provocador, el presidente de Estados Unidos firmó la orden rodeado de niños y niñas. Así, cumple una de sus promesas de campaña, en la que cuestionó en varias oportunidades a la dependencia estatal por “derrochar” y estar “contaminado por la ideología progresista”.

Minutos después del anuncio, el titular del Departamento de Eficiencia Gubernamental, el magnate Elon Musk, celebró con un meme en sus redes sociales en donde se ve a Trump con los dedos en V al lado de una lápida que lleva la inscripción “Departamento de Educación”. Musk ya recortó docenas de contratos y desmanteló el Instituto de Ciencias de la Educación, que recopila datos sobre el progreso académico del país.

La orden ejecutiva instruye que la secretaria de Educación -la ex ejecutiva de la asociación profesional de lucha libre Linda McMahon- facilite la clausura de esa secretaría. Aunque es casi imposible que el desmantelamiento pueda llevarse adelante sin una ley por parte del Congreso, que creó el departamento en 1979. El Partido Republicano ya adelantó que presentará un proyecto de ley para oficializar la medida.

A pesar de que la eliminación total requeriría esta aprobación del Congreso, la administración de Trump ya tomó medidas para reducir su influencia. Su plantilla fue recortada a la mitad y se cancelaron múltiples subsidios y contratos.

Trump justificó su decisión afirmando que el Departamento de Educación fracasó en mejorar los resultados académicos del país y que la responsabilidad debe volver a los estados. Uno de sus primeros actos como presidente en enero fue declarar que “los padres han atestiguado a escuelas adoctrinando a sus hijos en ideologías radicales anti-estadunidenses mientras deliberadamente obstruyen la supervisión de los padres”.

Entre las funciones más importantes, el organismo tiene a cargo la distribución de miles de millones de dólares en fondos federales a universidades y escuelas y, además, administra la cartera de préstamos estudiantiles. También desempeña un papel regulador clave en los servicios para estudiantes, desde aquellos con discapacidades hasta jóvenes de bajos recursos y sin hogar.

Amplio rechazo

Las reacciones en el Congreso no tardaron en llegar. Los demócratas denunciaron la medida como “peligrosa e ilegal”. El líder de su bancada en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries. advirtió que “cerrar el Departamento de Educación perjudicará a millones de niños en nuestras escuelas públicas, a sus familias y a los docentes”, mientras que el representante Bobby Scott, el demócrata de mayor rango en el Comité de Educación y Trabajo de la Cámara, acusó a Trump de promover una agenda de “segregación escolar”.

Por su parte, el presidente del Consejo Americano de Educación, Ted Mitchell, calificó este plan de “teatro político”. “Las medidas arbitrarias y desacertadas de la administración Trump para vaciar el departamento ya han causado un daño significativo a los estudiantes y contribuyentes”, declaró.

El desmantelamiento tendría un fuerte impacto sobre todo en las universidades. Esta secretaría maneja los préstamos y asistencia financiera para estudiantes, como el proceso para acceder a estos fondos. La secretaría maneja aproximadamente 1.5 billones de dólares en deuda estudiantil para más de 40 millones de jóvenes que solicitaron préstamos.