Esta mañana el Presidente Javier Milei tuvo una reunión con Wu Weihua, Vicepresidente de la Asamblea Popular China; Wang Wei, el embajador de China en Argentina y Qiu Xiaoqi, el representante especial del Gobierno chino para Asuntos de Latinoamérica.
El encuentro se da para apaciguar las relaciones entre China y Argentina y sobre todo porque Xi Jinping decidió frenar el swap con Argentina. El Swap es la posibilidad de acceder a los yuanes de parte del gobierno argentino para hacer frente a sus compromisos con organismos multilaterales de crédito como el FMI.
Este acuerdo se realizó durante el gobierno de Alberto Fernández por una ampliación de cinco mil millones de dólares y se frenó cuando Milei ganó las elecciones porque había tenido declaraciones fuera de lugar hacia el gobierno y respecto al rol geopolítico de China.
Hace unas semanas atrás, Milei acusó a China de “asesinar” a sus ciudadanos que “quieren ser libres” y además sostuvo que no iba a “hacer pactos con comunistas” y que incluso apuntaría a la ruptura de las relaciones con Beijing.
La respuesta del gobierno chino fue a través del vocero de la Cancillería de China, Wang Wenbin, quien invitó a Milei a “ver con sus propios ojos” cómo es la realidad del país, más allá de las ideologías. “Creo que si el Sr. Milei puede venir a China y ver el país por sí mismo, encontrará una respuesta totalmente diferente a la pregunta de “si los chinos son libres o no y si China es segura'”, manifestó.
Luego de todas estas declaraciones desafortunadas de Javier Milei deberá encarar reuniones diplomáticas con el segundo socio comercial de Argentina. Luego de la reunión de esta mañana, el presidente le envió a su par chino una carta con un pedido formal para que renueve el swap.
Desde China declararon a través de la vocera de la cancillería china, Mao Ning: “El presidente Javier Milei agradeció al presidente Xi Jinping por haber mandado al enviado especial Wu Weihua a su toma de posesión. Destacó que el nuevo gobierno de Argentina otorga gran importancia a sus relaciones con China y continuará siguiendo firmemente el principio de una sola China y está dispuesto a promover aún más los intercambios y cooperación entre los dos países”.
El presidente argentino deberá resolver una de las relaciones más importantes a nivel económico para el país, no sólo porque Beijing es el segundo socio comercial sino también porque es la segunda potencia a nivel mundial. Negar la realidad no es la solución.