La exfuncionaria del corresimo, María de los Ángeles Duarte Pesantes abandonó la Embajada argentina en Ecuador -donde tenía asilo desde diciembre de 2022 pero habitaba como huésped desde 2020- sin que nadie se enterara entre el 11 y 12 de marzo, según confirmó ayer la Cancillería argentina. Según trascendidos se encontraría en Venezuela a la espera del pasaporte argentino.
Duarte Pesantes fue funcionaria del correismo durante varios períodos e incluso fue candidata a la alcaldía de Guayaquil. Fue condenada junto a casi 20 personas por el caso de corrupción que sentenció también al expresidente Rafael Correa, que no pudo presentarse a elecciones en los últimos comicios en Ecuador y que calificó en repetidas ocasiones la maniobra como parte del “lawfare” en contra de su gestión.
Duarte recibió 8 años de prisión por el delito de cohecho, que, según la legislación penal ecuatoriana, se le atribuye a un funcionario público que recibió beneficios pecuniarios indebidos al realizar u omitir un acto, o demorar y hasta promover actividades relacionadas con sus funciones para su propio beneficio o el de otros, en perjuicio del Estado.
La Cancillería argentina informó al Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador, que la ciudadana María de los Ángeles Duarte Pesantes ya no se encuentra en la Embajada argentina.
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— Cancillería Argentina 🇦🇷 (@CancilleriaARG) March 14, 2023
En 2020 los acusados apelaron la condena ante el tribunal de primera instancia y Duarte ingresó a la embajada argentina en Quito, donde fue calificada como “huésped” hasta que se le concedió asilo diplomático en diciembre de 2022. En septiembre de 2020, la apelación fue desestimada y la condena de Duarte se confirmó. De no haber sido enviada a la embajada, la exministra habría sido encarcelada en una de las cárceles del país.
El 9 de febrero de 2021, Duarte fue procesada por el delito de incumplimiento de una decisión legítima de la autoridad competente porque ingresó a la embajada argentina con la intención de eludir sus medidas cautelares de presentarse periódicamente ante los jueces penales del Guayas y utilizar un grillete electrónico para el rastreo satelital.
La gestión del presidente Lasso junto con la justicia de ese pais consideraron que la exfuncionaria correista había evadido sus responsabilidades penales, por lo cual Duarte Pesantes permanece desde entonces en condición de “prófuga de la justicia”, incluso mientras habitó la embajada argentina en Quito.
La noche del último lunes se conoció que Duarte escapó de la sede diplomática argentina. Duarte dijo en sus redes sociales que tomó esta decisión ante la negativa del gobierno ecuatoriano de entregarle un salvoconducto.
Debido a este conflicto, el embajador argentino en Ecuador, Gabriel Fuks fue calificado como “persona no grata” por las autoridades de Quito y le dieron un plazo de 72 horas para abandonar Ecuador, lo que equivalía a una expulsión. En respuesta el Ministerio de Relaciones Exteriores, Santiago Cafiero, resolvió solicitar el retiro del embajador ecuatoriano Monge Yoder luego de tomar conocimiento de la situación de Fuks.
