Por el conflicto Irán-Israel sube el precio del combustible y Argentina se salva por el Gasoducto NK

El conflicto Irán-Israel desató la suba del precio internacional del petróleo y el gas. ¿Qué pasaría si Argentina no tuviera el Gasoducto Néstor Kirchner?

La noche del domingo, Irán bombardeaba a Israel con drones y misiles, y a partir de ahí se desatan teorías sobre una tercera guerra mundial y el rol que ocupará Argentina frente al conflicto.

Luego del ataque Iraní a Israel, los mercados internacionales se resguardaron por los principales recursos afectados en la guerra: petróleo y oro. El primero tiene que ver con la zona geográfica donde ocurre el conflicto; la cual produce un tercio del petróleo del planeta, y su principal canal de transporte (18,5 millones de barriles al dia); el estrecho Ormuz, en el Golfo de Pérsico.

Varios países importadores de petróleo se verán afectados por el incremento del precio del combustible, pero ¿Cómo afectará eso a Argentina? ¿Qué importancia tiene Gasoducto Néstor Kirchner?

De importar a autoabastecerse

Desde hace dos años, con la finalización del Gasoducto Néstor Kirchner, Argentina logró transportar al interior del país el petróleo extraído en Vaca muerta, el segundo yacimiento de petróleo en el mundo. Así, llegó a la meta que se había propuesto en el 2012, mediante la sanción de la Ley N°26.741 de Soberanía Hidrocarburífera, donde se fijó como prioridad nacional alcanzar el autoabastecimiento energético, algo que no ocurría desde 2011.

El año pasado Argentina ahorró 2100 millones de dólares por sustitución de importaciones y se preveía un superávit para este año de 12.000 millones de dólares, según el Ministerio de Economía de la Nación de la anterior gestión de gobierno.

Más allá de las divisas ahorradas por sustitución de importaciones, el país tiene su propio precio de combustible que no está atado necesariamente al precio internacional. Por lo que, al momento de ocurrir un conflicto externo que incrementa el precio del combustible, Argentina no se ve tan afectada como el resto de los países, gracias a su autonomía tarifaria.

Luego, será una discusión frontera hacia adentro, entre las negociaciones que haga el gobierno con el puñado de empresas que produce y distribuye el crudo, como YPF, Petrobras, ESSO (actualmente Aixon), Puma y Shell.

Recordemos que el agosto pasado, en plena campaña electoral, había faltante de combustible en la mayoría de estaciones de servicio del país, y las razones que circulaban era por una próxima devaluación, o por estar próximos al vencimiento del congelamiento de precio que había delimitado el ex ministor de Economía, Sergio Massa.

Desde las empresas explicaban que tenía que ver por el faltante de divisas del gobierno por importar el 20% del combustible que falta para completar el mercado interno. Sin embargo, desde los Sindicatos a fines al Petróleo y Gas, afirmaban que se debía a una “sucia” maniobra ya que “petróleo no falta en Argentina”, dijo el secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado, Marcelo Rucci.

A pesar del contexto que deja viento en contra para muchos países, Argentina no se encuentra en desventaja gracias a la existencia de un sistema de producción y distribución de Gas y Petróleo autónomo. Sin embargo, ¿Sabrá aprovechar el viento a favor y saldar discusiones internas?

Importador por exportador

Paradójicamente, a pesar de no cumplir con su autoabastecimiento, Argentina nunca dejó de exportar gas y petróleo. En 2022, Argentina exportó 3 mil millones de pesos en Petróleo crudo, convirtiéndolo en el exportador número 31 de Petróleo crudo en el mundo.

Al incrementarse el precio internacional, al país le ingresarán mayores divisas de sus compradores principales como Estados Unidos, Brasil, Países Bajos, Chile y Reino Unido.
De manera contraria, el Gas Natural Licuado que Argentina importa todos los inviernos tendrá un costo más elevado por su poca oferta en el mercado internacional.

Sin embargo, el gobierno nacional ya cerró la compra de GNL a un precio total de US$ 210 millones. Los  primeros diez buques de Gas Natural Licuado (GNL) llegarán a fin de mes.

Para prevenir situaciones externas que modifican escenarios nacionales, es que desde Bahía Blanca existe el proyecto de la planta de Gas Natural Licuado, que producirá 5 millones de toneladas al año de GNL, y que servirpa tanto para consumo interno como para exportación.