Tras pocos días de que se cumpliera un año de la asunción de Pedro Castillo al gobierno de Perú, la crisis política y económica que atraviesa al país, sumado a los intentos desestabilizadores de la oposición, tienen al gobierno al borde del abismo.
En entrevista con el programa Horizonte Sur Global de BARRICADA TV, el líder del movimiento rondero de Perú, Santos Saavedra Vazquez, hizo un balance de la situación actual y destaca el rol de las rondas de campesinos en la defensa del gobierno.
“Las rondas campesinas son organizaciones descendientes de los pueblos originarios antes de la creación del estado peruano, en las cuales nos hemos vuelto a organizar a partir de la década del 70. Estas están constituidas por personas del ámbito rural, tanto de amazonía, zona andina y de la costa. Es una organización territorial cuya función es tener una autoprotección de la seguridad y la justicia basada en el derecho consuetudinario”, explicó el dirigente.
Vazquez también agregó que las rondas campesinas “contribuyen al fortalecimiento de la democracia en nuestro país y venimos a ser un sujeto colectivo organizado a nivel nacional”. Es por este motivo que el dirigente considera que este movimiento viene siendo blanco de ataques.
“Estamos siendo totalmente atacados con una guerra sucia por parte de la dictadura mediática y de los voceros de los conservadores, de los grupos de poder económico y de la extrema derecha, asociados al poder judicial que tiene la tarea de criminalizar a las rondas campesinas. Nos acusan de delitos con el objetivo de desorganizar, desmovilizar y generar temor”, señaló el dirigente, que apunta que esto se debe también a la defensa del gobierno de Castillo, que las rondas vienen llevando a cabo en contraposición a los intentos desestabilizadores de la oposición.
En esa línea Vázquez recordó que si bien las rondas tienen una normativa propia, validada por la ley nacional, y están agrupadas en la Central Única de Rondas Campesinas del Perú, que es la más grande y representativa del país, las rondas sufren la difamación por parte de la oposición y algunas instituciones alineadas a los intereses del poder económico.
“En este momento vivimos una campaña de difamación a raíz de los intentos de desestabilización que hacen del gobierno a partir de que se informó que los ronderos habían secuestrado a trabajadores de los medios de comunicación. Esto produjo que desde el Congreso golpista se empiece a debatir la quita de derecho a las rondas campesinas. Lo que se busca es atacar a las organizaciones que tienen identidad y que tienen resistencia y que están dispuestas siempre a luchar para que se hagan realidad proyectos como la asamblea constituyente”, apuntó el dirigente peruano.
Consultado acerca del apoyo al presidente Pedro Castillo, Vazques explica que “Perú por primera vez instaló un gobierno con identidad popular. Ahora está avasallado, acorralado por los sectores que ganaron poder en los períodos de gobiernos neoliberales. Lamentablemente, una vez instalado el gobierno comenzaron los ataques sistemáticos del poder legislativo para desestabilizar al gobierno con la presentación de solicitudes de vacancia y la censura a los ministros de Estado”.
Pero, por otro lado, se centró en la falta de insistencia del Ejecutivo para impulsar proyectos surgidos desde las rondas. “Como rondas campesinas y sectores agrarios, hemos presentado tanto al poder legislativo y ejecutivo una agenda. Esa agenda contiene cinco proyectos de ley para fortalecer jurídicamente a estas organizaciones. Lo lamentable es que ni el Ejecutivo ni el Legislativo lo impulsaron desde que asumieron ni tampoco lo llevaron a un debate para que se apruebe este año”.
El dirigente también hizo mención a uno de los anuncios de Castillo en relación a lo que denominó como segunda reforma agraria. “La segunda reforma agraria le corresponde al ejecutivo o en todo caso a las bancadas en el parlamento al menos elaborar. No puede ser solamente por declaración, tiene que hacerse mediante una ley para que tenga el peso necesario y el efecto que se requiere. Ni el Ejecutivo ni el Legislativo han tomado iniciativa, sólo nosotros las organizaciones campesinas agrarias que hemos elaborado un proyecto de ley para que el ejecutivo lo haga suyo y lo presente en el Congreso de la nación”.
El intento de golpe de cada día
En relación a las protestas del mes de abril, Santos Saavedra Vazquez apunta que “esta crisis que se nos presenta es resultado de la política neoliberal, que no es cosa de este gobierno. Con el aumento de los combustibles, la derecha estaba aprovechando muy bien para poder levantar al sector transportes y llevar a una paralización que arrincone al gobierno. Esto formó parte del plan de desestabilización al gobierno a lo cual, mientras los transportistas reclamaban que se bajen los costos, la derecha aprovechaba para pedir la vacancia, lo cual fue desmentido por los organizadores de las movilizaciones”.
A partir de esa embestida, surge desde las organizaciones de base un pedido de asamblea constituyente que llevó al ejecutivo y que desde allí fue llevado al legislativo. Allí fue echado por tierra. No se impulsó ningún tipo de debate y se privó al pueblo peruano de su derecho de decidir en un referéndum de consulta. En este momento la derecha salió a dar su golpe en Lima, movilizando a sectores que nunca se habían movilizado de los distritos más adinerados del país”, señala el dirigente.
“Siempre el gobierno está con esa presión del golpismo, de los sectores conservadores y la presión mediática. Eso fue en abril y posteriormente hubo otras movilizaciones de respaldo al gobierno” explica Vazquez. “En este momento Perú sigue tenso, se ha elegido una nueva mesa directiva en el Congreso cuyo proyecto principal es el golpismo, al igual que la prensa hegemónica, que viene llevando adelante todo un trabajo de desestabilización para que caiga el gobierno e imponer su proyecto político y económico a la fuerza y con más violencia”.
Para ver la entrevista completa: https://www.youtube.com/watch?v=HaGfH5MWOoE&t=835s
