Misiones vive momentos de tensión con el paro de docentes y de policías de la provincia. El pasado 17 de mayo comenzó una fuerte protesta de la Policía frente al Comando Radioeléctrico de la ciudad de Posadas que se llenó de efectivos de toda la provincia que reclaman por su sueldo.
Ni bien arrancado el conflicto, el Ministerio de Gobierno se negó al diálogo e impulsó denuncias por sedición, hurto de patrulleros, daños e interrupción de las comunicaciones del 911.
La protesta de las fuerzas de seguridad se tornó incontrolable cuando se sumaron docentes y trabajadores de la salud. El domingo, la capital misionera había amanecido con la llegada de los gendarmes que el gobernador le había solicitado expresamente a la Ministra de Seguridad de la Nación para intentar desactivar el corte que efectivos policiales estaban realizando en la esquina de Uruguay y Félix Bogado y a los cuales se plegaron docentes a una cuadra de distancia.
Por varios minutos hubo corridas, empujones, forcejeos y también quema de neumáticos sobre Av. Uruguay y Trincheras de San José, en pleno centro de Posadas.
La propuesta del gobierno provincial orillaba el 15 por ciento de aumento, muy por debajo del 100 reclamado no solo por efectivos, sino también por docentes y personal de salud, los tres sectores que protagonizan los reclamos que colocan a Misiones en un estado de tensión inédito.
El mismo domingo, el jefe de la fuerza había logrado un principio de acuerdo y se llegó a anunciar la firma de un acta, pero imprevistamente la cúpula policial abandonó el lugar sin realizar anuncios.
En medio de la negociación que se lleva a cabo puertas adentro, sobrevuela la versión de un posible un desalojo de las fuerzas federales contra la protesta. Este lunes los policías continúan acampando como forma de protesta y mantienen su postura de no aceptar una propuesta menor al 70 por ciento de incremento.
Se espera que en el transcurso del lunes, el primer mandatario Hugo Passalacqua anuncié los aumentos prometidos la semana pasada, aunque las expectativas de que alcance el 100 por ciento reclamado son bastante bajas.
Esta no es la primera vez que la Policía de Misiones se acuartela exigiendo mejoras salariales. Durante el 2012 hubo un reclamo similar, pero en esa oportunidad los policías activos y retirados tomaron la sede del Comando Radioeléctrico. Después de varios días, el Gobierno cedió y les otorgó el incremento que reclamaban.