Una industria que se derrumba

Las industrias argentinas trabajan a la mitad de su capacidad, mientras que la producción cayó en un 12 por ciento durante enero como producto del ajuste económico de Javier Milei.

Durante enero, las fábricas mantuvieron ociosos casi la mitad de sus equipos. De esta manera, solo empleó el 54,6% de toda su capacidad instalada, según informó el Indec este miércoles.

Se trata del nivel de ocupación más bajo desde junio 2020, en plena pandemia. Para darse un ejemplo, dos sectores claves de empleabilidad como la metalmecánica y la industria automotriz funcionaron al 33,4 y 25,7 de su capacidad.

En comparación con enero 2023, la capacidad instalada bajó del 62% al 54,6%. En noviembre del 2023, antes que asuma Javier Milei como presidente, la industria utilizaba un 66,4% de su capacidad instalada.

Este dato es un síntoma de la parálisis de la actividad industrial y económica del país. El ajuste realizado por el gobierno nacional frenó la demanda y el consumo. Estos datos se interlazan con la caída de la industria.

En diciembre, 14 de las 16 divisiones de la industria manufacturera presentaron caídas interanuales, según informó el INDEC. Todos los sectores presentaron descensos que van desde el -42,2% a -6,1%.

En promedio, la actividad industrial cayó un 12,8% con respecto a enero 2023. Con respecto al mes de noviembre, la variación negativa fue del 5,4%.

Esta crisis en la producción industrial es la más pronunciada desde la salida de la pandemia e incluso se convierte en el descenso más destacado desde 2016.