Ayer el presidente keniano despidió en un acto oficial a 400 policías, antes de su partida para liderar la misión multinacional autorizada por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas “para lograr la paz” en la nación caribeña.
“Kenia tiene sólidas credenciales en materia de pacificación y resolución de conflictos. La presencia de nuestros agentes de policía en Haití brindará alivio a mujeres, hombres y niños cuyas vidas han sido destrozadas por la violencia de las bandas armadas”, dijo Ruto, al indicar que trabajarán con la comunidad internacional para lograr una estabilidad duradera en Haití.
Kenya has solid credentials in peace-making and conflict resolution globally. Our police officers’ presence in Haiti will give relief to the men, women and children whose lives have been broken by gang violence. We will work with the international community to bring lasting… pic.twitter.com/Org9RWzViV
— William Samoei Ruto, PhD (@WilliamsRuto) June 24, 2024
Lo contradictorio es que esta mañana un grupo de manifestantes se movilizó al parlamento en Nairobi, la capital de Kenia, donde prendieron fuego las inmediaciones en protesta por la
nueva ley de finanzas del gobierno de Ruto, que sube varios impuestos y busca la creación de nuevos por órdenes del FMI. La crítica al gobierno keniano es que estas medidas económicas empujan a más personas a la pobreza.
Según datos del Grupo de Trabajo sobre Reformas Policiales de Kenia (PRWG-Kenya), al menos 17 personas fallecieron luego de una jornada de manifestaciones como no se habían visto nunca en el país africano.
Kenya has solid credentials in peace-making and conflict resolution globally. Our police officers’ presence in Haiti will give relief to the men, women and children whose lives have been broken by gang violence. We will work with the international community to bring lasting… pic.twitter.com/Org9RWzViV
— William Samoei Ruto, PhD (@WilliamsRuto) June 24, 2024
¿Qué está pasando en Haití?
Desde hace unos meses Haití vive una nueva crisis que se agrava luego del asesinato del expresidente Jovenel Moïse en julio de 2021 que fue reemplazado por Ariel Henry. La transición, que se produjo sin el consentimiento del pueblo haitiano, fue rápidamente sancionada por las potencias occidentales, incluido Estados Unidos.
Después de esto, hubo un incremento de la violencia por parte de grupos paramilitares en Haití, lo que causó desplazamientos masivos, especialmente en la capital, Puerto Príncipe. Mientras tanto, la población salió a las calles para protestar por la falta de respuesta del gobierno a los problemas de la pobreza y la inseguridad. Los movimientos sociales y políticos del país habían advertido que la situación no debía ser utilizada como pretexto para una intervención extranjera que fue finalmente lo que ocurrió.
Esto último es un dato a destacar debido al papel histórico de países como Estados Unidos en debilitar la soberanía de Haití, a través del golpe de 2004 y la ocupación directa, y considerando que muchas de las armas usadas por los grupos del país llegaron en avión desde Estados Unidos.
El grupo de agentes que llegó esta mañana, forman parte del total de 1,000 policías que Kenia ofreció para encabezar una nueva misión de ocupación en Haití que además recibieron entrenamiento en diferentes ámbitos que incluyen, por ejemplo, idiomas.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos Joe Biden, celebró el primer contingente de 400 soldados kenianos y solicitó que más países apoyen la “misión de seguridad” ya que según él, “es la mejor oportunidad que tiene ese país para alcanzar la paz”.
Entre los países que se comprometieron a aportar personal y recursos financieros a dicho despliegue, están España, el Reino Unido, Benín, Canadá, Francia, Alemania y Turquía. Estados Unidos, el mayor contribuyente económico a la misión, suministró unos 360 millones de dólares, de ellos 60 millones solo en equipamiento, indica EFE.
“Continuaremos nuestra estrategia diplomática para alentar a más países a unirse a este esfuerzo, porque lo que sucede en Haití es importante para sus vecinos, la región y el mundo. Haití es un país extraordinario y su población merece lo que merece la gente en todas partes: seguridad, oportunidades y libertad”, manifestó Biden.
Actualmente en Haití hay un gobierno de transición que deberá organizar elecciones generales en febrero de 2026, casi una década después de los últimos comicios.