El presidente electo Javier Milei volvió a ratificar que su administración apuntará a una política de shock para encontrar el equilibrio fiscal como principal objetivo de su gestión. Y aseguró que “los primeros 6 meses de su gestión serán muy duros por el ajuste” que impulsa.
“Fuimos muy explícitos: queremos un Estado pequeño que tenga la característica de honrar sus compromisos. Con esto estoy diciendo: voy a hacer el ajuste fiscal para pagar la deuda”, señaló Milei.
El presidente electo descartó la apropiación de los ahorros de los argentinos: “En mi discurso también avisé que se van a respetar a rajatabla los derechos de propiedad. El problema de las Leliq lo vamos a arreglar con una solución de mercado, sin plan Bonex”, afirmó en una entrevista con el economista Manuel Adorni.
Según Javier Milei el ajuste lo pagará la política y advirtió que si no aceptan “puede que termine en una hiperinflación y va a ser monstruoso porque va a mandar al 90% de la población debajo de la línea de la pobreza o hacer un ajuste que lo pague la política“.
Asimismo amenazó a aquellos que se resistan a las políticas de ajuste en la calle: “Se aplicará la ley y no me voy a dejar extorsionar. Si no, no resolvemos más nada. También dije en mi discurso que ‘dentro de la ley, todo y fuera de la ley, nada’. No podemos ceder a la extorsión de los violentos, de los que tienen algún privilegio”.
El presidente electo también volvió a señalar el objetivo de dolarizar la economía: “la dolarización se podrá instrumentar en un año”. Y agregó que “la convertibilidad, que es el plan más parecido al programa que tenemos diseñado, recibió de (Raúl) Alfonsín un salario de 180 dólares y lo llevó a 1.800. Hoy tenemos un salario promedio de 300 dólares y si logramos el resultado de la convertibilidad podríamos tener un salario seis veces más grande”.