Mondino pone paños fríos en la relación con Brasil

La futura ministra de relaciones exteriores de Argentina viajó a Brasil, a instancias del embajador Daniel Scioli, para buscar una aproximación entre Lula y Milei de cara a la asunción del 10 de diciembre. 

En un movimiento sorprendente destinado a fomentar lazos diplomáticos entre el próximo gobierno argentino liderado por Javier Milei y Brasil, Diana Mondino, la futura canciller, mantuvo una reunión con el Ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, en Brasilia. El encuentro discreto tuvo lugar en el Palacio Itamaraty y según trascendió fue orquestado por el actual embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli. También estuvo presente en la reunión el embajador brasileño en Argentina, Julio Bitelli.

El objetivo principal de este encuentro encubierto fue presentar la agenda de la nueva administración electa al presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y aliviar las tensiones entre los líderes de La Libertad Avanza (LLA) y el Partido de los Trabajadores (PT).

Mondino, quien está destinada a convertirse en la canciller bajo el gobierno de Milei, entregó a Vieira una invitación para que el presidente Lula da Silva asista a la ceremonia de inauguración de Milei el 10 de diciembre. Este movimiento diplomático inesperado se produce en medio de un esfuerzo más amplio por parte de la próxima administración argentina para forjar lazos más estrechos con Brasil, apenas una semana después de que Milei saliera victorioso en la segunda vuelta electoral y tras los dichos del presidente electo acerca del futuro de las relaciones bilaterales con el país vecino.

En un comunicado oficial emitido por el Palacio de Itamaraty y reportado por Télam, la misión de Mondino quedó claramente delineada: “La diputada electa y canciller designada del gobierno de Milei, Diana Mondino, se encuentra en Brasilia para una reunión de trabajo con el ministro Mauro Vieira. En la ocasión, entregó la invitación del presidente electo Javier Milei para que el presidente Lula participe en la ceremonia de asunción el 10 de diciembre”.

La reunión abordó diversos aspectos de la relación bilateral, incluyendo discusiones sobre la etapa actual de las negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea. Brasil, un socio comercial clave durante más de tres décadas, importa un volumen significativo de productos argentinos, como destacan los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC).

En 2022, Argentina importó automóviles desde Brasil por un valor de 406 millones de dólares, seguido de aglomerados de hierro (354 millones de dólares), motocicletas más pequeñas (345 millones de dólares), fuel oil (320 millones de dólares) y tractores (149 millones de dólares). Por otro lado, Argentina exportó bienes por valor de 1.115 millones de dólares a Brasil, incluyendo vehículos de carga, 972 millones de dólares en trigo y cebada, 597 millones de dólares en automóviles, 494 millones de dólares en otros vehículos y 243 millones de dólares en otras manufacturas de plástico y caucho.

El gesto diplomático no se limitó a la entrega de la invitación para la inauguración, ya que las discusiones abarcaron temas más amplios, incluyendo el estado actual de los asuntos bilaterales y las negociaciones en curso entre el Mercosur y la UE. Dada la historia compartida y la proximidad geográfica entre las dos naciones, ambas partes expresaron el deseo de continuar la colaboración en áreas como la integración física, el comercio y la presencia internacional, con el objetivo final de lograr crecimiento y prosperidad mutuos para los ciudadanos de Argentina y Brasil.

En una carta personal de Javier Milei a Lula, el presidente electo transmitió un mensaje de cordialidad y extendió una invitación para que el brasileño se uniera a la asunción prevista para el 10 de diciembre. Milei expresó optimismo sobre los desafíos compartidos que enfrentan ambas naciones y subrayó el potencial de cambio económico, social y cultural basado en los principios de la libertad.

A medida que se desarrolla este gesto diplomático, el futuro gobierno argentina parece embarcarse en un nuevo capítulo de cooperación y progreso compartido, dejando atrás las diferencias políticas subrayadas durante la campaña y a instancias de las fuerzas políticas del pro que embarcaron con fuerza en la gestión que encabezará Milei.