Acto de CFK en Avellaneda: expectativas y reordenamiento 

La vicepresidenta de la Nación hará su primera intervención pública luego de su histórica renuncia a la candidatura en 2023. Los posibles escenarios que se abren con la palabra de Cristina. 

En su último mensaje público, la vicepresidenta sorprendió al renunciar a su candidatura en 2023.

La vicepresidenta de la Nación hará su primera intervención pública luego de su histórica renuncia a su candidatura, debido a la sentencia por la causa Vialidad que la condenó a seis años de prisión e inhibición perpetua a ocupar cargos políticos. La actividad tendrá lugar este martes a las 19 horas, en la inauguración del centro de recreación de Villa Corina de Avellaneda que llevará el nombre de Diego Armando Maradona.

La titular del Senado de la Nación estará acompañada por el intendente local y exministro de Vivienda, Jorge Ferraresi. Según pudo saber ARG MEDIOS no habrá acreditación a la prensa debido a la capacidad del lugar, por lo que será un acto exclusivo para militancia y gente de la localidad. El discurso se podrá seguir por su canal de Youtube oficial.

Cristina iba a dar una alocución la segunda semana de diciembre, en el marco de una cumbre del Grupo de Puebla, en la que el presidente Alberto Fernández también asistiría. Pero la dirigente contrajo coronavirus y la actividad debió posponerse. Ahora ya recuperada, decidió volver a la arena política.

Al respecto, el intendente de Avellaneda se refirió al renunciamiento a ser candidata en 2023 por parte de la dos veces presidenta: Ferraresi ventiló que Cristina le pidió al Frente de Todos (FdT) “construir desde lo político”, por lo que vaticinó que en ese espacio “habrá un debate interno en los próximos meses”.

A su vez, Ferraresi aclaró que “si Cristina tiene que ser candidata, tendrá que serlo” porque “lo importante es que en 2023 el FdT siga siendo gobierno”. Sin embargo, cuando CFK anunció su renuncia dijo: “No voy a ser candidata a nada en 2023. El 10 de diciembre del 23 me voy a mi casa sin fueros como hice en 2015”.

Volviendo al acto de este martes, por su volumen político y electoral, es sabido que cuando Cristina habla se generan diversas expectativas. Su última aparición en el debate público fue justamente el día de la sentencia que ella ya consideraba escrita desde hace mucho, en la cual dedicó varios minutos a desarmar (nuevamente) las irregularidades de la causa vialidad; así como denunciar los materiales filtrados de los grupos de telegram de jueces, fiscales y funcionarios del PRO. 

Pese a no ser candidata, no caben dudas que Cristina será una figura importante de cara al armado electoral del 2023. Debido al sensible escenario económico que vive el país, con una inflación anual que con seguridad superará el 90%, la oposición de Juntos por el Cambio se siente fortalecida y con chances de ser gobierno el próximo año, aunque aún sin un candidato que pueda aunar y generar consenso hacia dentro de la coalición. En el Frente de Todos, sin Cristina en las boletas, la incertidumbre cobra mucha fuerza. 

Por otro lado en su última alocución frente a la militancia en el Estadio Único Diego Armando Maradona de La Plata, la vicepresidenta habló de varios temas que bien podrían ser bases de una plataforma electoral: el problema de la autonomía de las fuerzas de seguridad y sus consecuencias a la hora de abordar la inseguridad, la repartición del crecimiento económico y los bajos salarios en el país, entre muchos otros. Es muy probable que desde su lugar de líder y referente política continúe denunciando las irregularidades del Poder Judicial y los problemas que le conlleva a la democracia.  

Mientras tanto, uno de los jueces que viajó a Lago Escondido junto a empresarios de medios y fiscales debió renunciar a una de las causas que tiene a cargo. Se trata del juez federal Pablo Cayssials, uno de los integrantes de la reunión en la estancia del magnate británico Joe Lewis, quien decidió apartarse de una causa en la que el conglomerado mediático de Clarin se niega a incluir a canales de TV comunitarios en su grilla. En su apartamiento argumentó “razones de delicadeza y decoro”.