El show de Milei en Brasil: evitó mencionar a Lula, pero reforzó su alianza con Bolsonaro

El presidente argentino participó en otro encuentro de la ultraderecha, esta vez en Camboriú. Le bajó un cambio a su ofensiva contra el presidente brasileño pero se puso al servicio de Bolsonaro, a quien calificó como un “perseguido judicial”.

Como en cada una de sus performances internacionales, el paso de Javier Milei este fin de semana por Brasil dejó mucha tela para cortar. El contexto no lo favoreció: arrancó compartiendo con su amigo Jair Bolsonaro el partido que la Verdeamarela perdió por penales ante Uruguay por la Copa América y cerró con la dura derrota de sus aliados de la extrema derecha francesa.

En el medio, el presidente argentino participó este domingo de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CAPC), un encuentro de ultraderechistas realizado en Camboriú, en el que decidió ponerle un freno a su ofensiva retórica contra Lula, a quien no se animó a mencionar en su discurso pese a los gritos de la tribuna.

El día anterior, había circulado la noticia de que el presidente brasileño podía retirar a su embajador en Buenos Aires si Milei volvía a insultarlo. Esto después de decir que el presidente argentino debía pedirle disculpas por las “tonteras” que dijo (lo llamó varias veces “corrupto” y “comunista”), cosa que Milei no hizo.

Con esa advertencia llegó Milei a Brasil y, a diferencia de su discurso en España, donde criticó duramente a Pedro Sánchez y generó un conflicto diplomático, esta vez el presidente argentino reculó y evitó poner las relaciones con el país vecino al borde de la ruptura.

Pero, de todas maneras, el viaje en implicó un nuevo capítulo que empeora el vínculo con el gigante del sur: fue su primera visita desde que es presidente y resultó todo un gesto que no se reuniera con Lula y, en cambio ratificara su amistad con Bolsonaro. A esto se suma su decisión de no asistir a la cumbre del Mercosur que inició este lunes en Paraguay.

 Milei arrancó su discurso, leído, agradeciendo a Bolsonaro y a su hijo Eduardo por la cálida bienvenida: “Realmente me hacen sentir como en casa y es siempre un placer estar entre amigos”. Uno de los momentos más destacados de su intervención fue su defensa ferviente del expresidente, investigado por el intento de golpe de Estado de 2023 e imputado por apropiación indebida de joyas que le regalaron en Arabia Saudita. “Miren la persecución judicial que sufre nuestro amigo Jair Bolsonaro”, señaló Milei.

Lo que siguió de su discurso estuvo centralmente dedicado a repetir lo de siempre, despotricar contra “el socialismo” al que, prometió, “lo vamos a sacar a patadas de todos los lados”.

“Hoy quiero hablarles de la receta económica y cultural del socialismo en América Latina, de que ellos están equivocados y nosotros tenemos razón”, arrancó. Para luego remarcar que, “como el socialismo es una ideología que va en contra de la naturaleza humana, necesariamente termina en esclavitud o muerte, no hay otro destino”.

 Además del clan Bolsonaro, participaron del evento varios gobernadores bolsonaristas, el excandidato a la presidencia de Chile José Antonio Kast, el ministro de Justicia de El Salvador, Gustavo Villatoro, el mexicano Eduardo Verásategui y el empresario boliviano Branko Marinkovic, presentado como posible candidato de la extrema derecha para las presidenciales del próximo año.

 Milei viajó acompañado por su hermana y secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, el ministro de Defensa Luis Petri, el vocero Manuel Adorni y el documentalista presidencial, Santiago Oría.

Durante su estadía en Brasil, Milei también recibió de parte de los Bolsonaro un regalo de gran connotación homofóbica y sexista. Se trata de “la medalla de las tres í”, que tiene la cara de Bolsonaro y contiene las palabras en portugués “Imbrochável, imorrível e incomível”. El hijo del ex presidente brasileño fue el encargado de explicar el significado a los hermanos Milei. La última destaca el “valor” de la heterosexualidad y que “ningún otro hombre te va a coger”.