Federalismo y paridad de género: el gobierno quiere ampliar la Corte

El Poder Ejecutivo acordó con los gobernadores un proyecto de ley para ampliar y modificar la Corte Suprema de Justicia, una jugada política de peso.

La Corte, actualmente con cuatro miembros, sigue siendo un poder intocable

El debate sobre la reforma de la Corte Suprema de Justicia llegó a un punto de no retorno en el país y el gobierno de Alberto Fernández tiene todo listo para presentar al Congreso un proyecto de ley para su ampliación y modificación. 

Se trata de una propuesta con dos ejes centrales: la representación federal y la paridad de Género. Este jueves, el presidente se reunió con 18 representantes de las provincias para terminar de contar con el apoyo de los gobernadores, en el marco de una de las propuestas que tendrá más impacto legislativo en este 2022. 

Allí se supo que la reforma de la Corte buscará ampliar de cuatro a 25 miembros, en donde deberá existir un mínimo de 12 mujeres. A su vez, dichos integrantes del máximo tribunal de justicia del país representarán a las provincias (24), mientras que el miembro restante será un representante de Nación. 

Lo debatido en Casa Rosada tuvo el aval de todos los allí presentes y además, se supo que el proyecto del Poder Ejecutivo cuenta con el apoyo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, un dato para nada menor si se tiene en cuenta que en los últimos meses, el presidente y la vice, no encuentran muchos puntos en común.

En síntesis, la idea que terminó de cuadrar a los gobernadores, significaría la existencia de un supremo en representación de las provincias, más un representante de Nación. 

El proyecto nació por iniciativa del presidente y fue elaborado por la Secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, así como por el viceministro de Justicia, Juan Martín Mena. 

Vale aclarar que este mismo viernes Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner se verán juntos luego de varias semanas sin coincidir en un acto, en el marco de los 100 años de YPF. 

“Si bien era un proyecto del Ejecutivo, el gobierno sabía que para hacer más federal la Corte se iba a necesitar el apoyo de los gobernadores y por eso cuando empezamos a trabajar el tema, el Presidente resolvió acercarnos la propuesta”, manifestó el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, dando a entender la apertura del primer mandatario. 

Por su parte, el gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto agregó que “estamos buscando la mejora institucional de la República Argentina y para eso hay que modificar la Corte buscando agilidad, eficiencia, federalismo y paridad de género”.

Si bien la iniciativa causará polémica -más si se tiene en cuenta que la Corte Suprema es un poder que se resiste a mínimas modificaciones-, en el mundo existen ejemplos similares de un tribunal máximo de justicia ampliado a varios miembros. La Corte Suprema de Chile, por ejemplo, la integran 21 representantes, mientras que en Brasil son 11, en Colombia 23 y en Costa Rica, 22. 

Actualmente existen cuatro proyectos de ley en el Senado con el objetivo de ampliar la Corte Suprema y el gobierno tendría en mente lograr la unificación de un solo proyecto para generar unidad y aprobarlo en el Congreso. El voto de los envíados de los gobernadores, será clave. 

Contexto necesario

En el pasado mes de abril la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) intercedió en el Consejo de la Magistratura, el órgano que elige los jueces de todo el país y que -por ley- está controlado por el Congreso de la Nación. 

La intromisión fue todavía más polémica, si se tiene en cuenta que quien ahora encabeza el Consejo es el propio presidente de la Corte, Horacio Rosatti.

La CSJN consideró que el organismo deberá funcionar con una estructura de 20 integrantes, según sostenía una vieja ley de 1997, pese a que la misma fue derogada hace tiempo atrás. La polémica intromisión de la Corte en los asuntos que le competen al poder Legislativo del Estado, tiene un capítulo previo cuando en diciembre del año pasado, declaró “inconstitucional” la última conformación del Consejo de la Magistratura y pidió que el Congreso vote una nueva ley para su modificación. Para eso, dio nada más que 120 días. 

Ese episodio encendió los ánimos en el gobierno nacional, que se vio realmente intervenido por el máximo tribunal, en una verdadera jugada política de parte de Rosatti. 

A esto se le debe agregar un episodio bochornoso que protagonizó la semana pasada el vicepresidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz, quien en una participación de un foro judicial en Chile, se animó a poner en duda una frase icónica de Eva Perón asegurando que “no puede haber un derecho detrás de cada necesidad porque no hay suficientes recursos para satisfacer todas las necesidades”. 

La frase mostró, una vez más, la lejanía incalculable que tiene la Justicia con la realidad y la vida de las personas “de a pie”.