Haití: Asesinan al presidente de facto Jovenel Moïse

Aún se desconoce la autoría del ataque que acabó con la vida de Moïse e hirió gravemente a su esposa. Escenario incierto en un país atravesado por la violencia organizada.

Jovenel Moïse

El mandatario haitiano Jovenel Moïse fue asesinado esta madrugada en su domicilio de Puerto Príncipe. La noticia fue comunicada en un escueto comunicado que lleva la firma del Primer Ministro de facto, Claude Joseph, donde se responsabiliza a un grupo armado y se menciona que algunos de los atacantes “hablaban español”.

Joseph convocó a un consejo extraordinario de ministros y declaró el estado de sitio en todo el país. La población, sin embargo, permanece expectante y pacíficamente en sus casas. Días atrás se había confirmado la nueva fecha para un referéndum constitucional que coincidía con la fecha de elecciones generales, el próximo 26 de septiembre.

La sociedad civil reclamaba hace meses la dimisión de Moise, procurando una salida democrática. Desde estos sectores organizados nadie convalida el magnicidio. La espiral ascendente de violencia organizada aparece vinculada mayormente a bandas armadas, que han crecido en despliegue y capacidad operativa gracias a su convivencia con poderes del Estado e internacionales.

Vida personal

Jovenel Moïse nació el 26 de junio de 1968 en una zona rural del Nordeste de Haití. Estudió ciencias de la educación en la Universidad de Quisqueya, de la capital, Puerto Príncipe. Moïse fue empresario que se dedicó al cultivo y exportación de bananas. Fue secretario general de la Cámara de Comercio e Industria de Haití donde se ganó el apodo de “hombre banana”.

Conocido como un outsider de la política —no había tenido ningún cargo antes de ser presidente—, tenía un vínculo estrecho con los Estado Unidos y con la poderosa élite haitiana. Durante su campaña electoral tuvo un discurso orientado hacia el sector rural, que representa a la mayor parte de la población haitiana. Moïse había prometido llevar agua corriente y electricidad a todo el país.

El gobierno de Jovenel Moïse

Durante 2015, el expresidente Michel Martelly designó a Moïse como candidato a presidente del Partido Haitiano Tèt Kale (PHTK). En los primeros comicios se dieron irregularidades que aplazaron durante algunos meses las elecciones presidenciales. Finalmente, Jovenel Moïse fue elegido como presidente en noviembre de 2016 con el 55,6% de los votos.

Hacia finales del 2018, el gobierno comenzó a tambalear debido a la devaluación de la moneda nacional y al aumento de la inflación. Además, Jovenel Moïse fue acusado de malversación de fondos. Según un informe del Tribunal de Cuentas Haitiano, las empresas de Moïse se encontraban “en el corazón de un plan de malversación de fondos”.

El 7 de febrero de este año se consumó en Haití un autogolpe protagonizado por el propio Moïse, tras vencer el período de cinco años de gobierno que estipula la Constitución del país. Moïse coronó así una larga deriva autoritaria que lo enfrentó a la movilización permanente de las clases populares, a la oposición política y al conjunto de poderes e instituciones del Estado.

El gobierno de facto deja tras de sí una larga deriva autoritaria que erosionó las diferentes instituciones del país. El parlamento fue cerrado en enero, y durante ese tiempo Moïse gobernó a través de decretos. La represión de la protesta social y la proliferación de violencia organizada a través de bandas armadas también fue una constante de su gestión, siendo uno de los casos más recientes la ejecución en las calles de un periodista y una activista feminista.



Más información:

La crisis en Haití no es ni abstracta ni eterna. Tiene fechas, causas y responsabilidades precisas. En el siguiente articulo, Lautaro Rivara desmonta una serie de prejuicios sobre la realidad haitiana.

Siete tesis equivocadas sobre la situación en Haití

Grupos armados avanzan en poder territorial y capacidad operativa en un país en crisis. Un análisis de la convivencia con el gobierno de facto de Jovenel Moïse y la responsabilidad de las grandes potencias en su apuesta de “caos organizado”.

¿Quiénes son y qué quieren las bandas armadas en Haití?

Desde Puerto Principe, la cobertura actualizada de Lautaro Rivara: