Inflación, tarifas y FMI: las horas cruciales del Frente de Todos

Las diferencias internas ya no se pueden alivianar. Menos frente a nuevos datos de inflación, discusión de tarifas y la presencia incómoda del FMI.

El Frente electoral que logró vencer frente a Macri, nunca encontró armonía para gestionar.

La interna del Frente de Todos atraviesa una de sus semanas más álgidas y se da precisamente en días en donde se conocerán los nuevos datos de la inflación, movimientos sociales realizarán una marcha en todo el país y se discutirá el aumento de las tarifas de luz y gas.

Para comprender la tensión, el contexto lo es todo: el pasado viernes, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner dejó varias frases que pudieron ser interpretadas como críticas abiertas hacia la gestión del presidente Alberto Fernández, luego de recibir el doctorado Honoris Causa en la Universidad de Chaco. Sin embargo, desde el Poder Ejecutivo no aquietan las aguas y salen a responderle. 

“Que nadie se haga la víctima, que acá los únicas víctimas son los que no llegan a fin de mes, no tienen laburo, no tienen para darle de comer a los chicos y los tienen que llevar de nuevo a un colegio para que le den un plato de sopa o de carne”, lanzó la ex mandataria, ante un aplauso sostenido. 

“Por eso tenemos la obligación de debatir, no la boleta única, sino cómo hacemos para devolverle a la gente la esperanza y los anhelos. Esta es mi mayor preocupación y mi mayor sensación de amargura: creo que no le estamos haciendo honor a tanta confianza, tanto amor y esperanza que depositaron”, concluyó Fernández de Kirchner, en clara señal de lo que piensa sobre el rumbo del gobierno nacional. 

Pero sea por estrategia o por coincidencia de agendas, en estas horas de pura confrontación, el presidente Alberto Fernández participará de una gira por Europa, en donde se entrevistará con el presidente español, Pedro Sánchez y posteriormente con el Canciller alemán, Olaf Scholz. En ambos países también mantendrá un encuentro con empresarios para “conseguir inversiones”. 

En el mientras tanto, son los ministros más fieles al presidente lo que -sin nombrarla- salieron a responder a la vicepresidenta, destacando logros económicos y números de crecimientos sostenidos. Aun así, fuera de la macroeconomía, la realidad de las mayorías se complica cada vez más. Para peor, hay dos factores que podrían acelerar la crisis: una inflación que no cesa y la aprobación de un aumento de tarifas. 

Este jueves, miles de personas llegarán a Plaza de Mayo

Marcha en todo el país

Este jueves 12, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) publicará los resultados de su nuevo informe sobre la inflación y mostrará los datos correspondientes a abril. Casi todos los economistas coinciden en que la cifra no será menor a los seis puntos, aunque algunos creen que podría superar ampliamente ese promedio. 

Así, la inflación interanual (2021-2022) alcanzará con comodidad los 50 puntos, generando así una de las inflaciones más grandes en la historia del país. 

También, durante este martes, miércoles y jueves está previsto que se realicen las audiencias públicas para definir los aumentos en las tarifas de luz y gas, en el marco de una quita de subsidios proyectada por el ministro de Economía Martín Guzmán. Si bien se piensan en nuevas facturas en donde quienes tienen mayor capital, puedan pagar más (es decir, diferenciadas), lo cierto es que se tenderá a un aumento general de todas las tarifas. 

Frente a este panorama, organizaciones sociales referenciadas en la izquierda realizarán una gran marcha federal, que nacerá desde Jujuy y Tierra del Fuego y finalizará en Plaza de Mayo este jueves 12. Los movimientos sociales reclaman por mayor asistencia social frente a un “escenario de ajuste”, rechazan el acuerdo con el FMI, así como también proponen la universalización del Programa Potenciar Trabajo. 

Como si fuera poco, en mayo se prevé la visita (virtual) de los directivos del Fondo Monetario Internacional, para realizar la primera audiencia de la economía argentina. Se trata de uno de los condicionamientos que impone el acuerdo que firmó el presidente Alberto Fernández con el organismo internacional, en donde cada tres meses el Fondo auditará las cuentas del país.

Algunos economistas sostienen que se trata de una sutil violación de la soberanía del país, que se verá necesariamente en la obligación de aplicar políticas que le exiga el FMI. 

Frente a este duro escenario, la respuesta sobre cómo podrá ordenarse una interna cada vez más caliente, parece ser difícil de responder. Más sabiendo, que de ahora en más, cada movimiento político será pensado en clave electoral, frente al cercano 2023.