Llegó la primera gran crisis en La Libertad Avanza. Lo que ya se venía manifestando con algunos gestos y detalles, finalmente se concretó este miércoles por la tarde cuando desde la Oficina del Presidente (y sus trolls) salieron al cruce de la vicepresidenta Victoria Villarruel.
¿El motivo? Que la segunda mandataria convoque a tratar el mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/23, que venía siendo dilatado en la Cámara de Senadores, desde que el gobierno lo presentó en el Congreso, en los últimos días de diciembre del año pasado.
Pero claro está: por estas horas hay muchas lecturas y algunas sugieren que Villarruel buscó darle un golpe certero a la gestión de Javier Milei, si finalmente el DNU es rechazado en la Cámara Alta. De esta forma, agravando la insólita situación para el oficialismo, que todavía no pudo lograr la aprobación de una sola ley a su favor.
“El potencial rechazo del DNU conllevaría un grave retroceso en los derechos y necesidades del pueblo argentino”, dice parte del comunicado que se compartió desde la cuenta oficial que comunica la información presidencial. Además, agregó que “no se dejen cautivar por el canto de sirena de quienes pretenden ‘anotarse’ victorias de corto plazo”.
“La iniciativa de promover una fórmula sin consenso violenta el espíritu del acuerdo promovido en la convocatoria al Pacto de Mayo”, señaló y remató: “Pretenden avanzar con una agenda propia e inconclusa, a fin de entorpecer el diálogo”.
Si bien es cierto que desde el Poder Ejecutivo estaban esperando tener los votos necesarios para tratar el mega DNU en el Senado, también es cierto que su tratamiento venía siendo dilatado hace varias semanas… y que esa mayoría que esperaba tener el oficialismo, no se está logrando.
Hasta ahora nadie puede confirmar una estrategia en conjunto entre Villarruel y el expresidente Mauricio Macri, pero luego de que se ventilara que ambos tenían buena comunicación, los rumores por los pasillos de la Casa Rosada se aceleran.
Todavía más si se tiene en cuenta que hasta ahora el ex mandatario sufrió el desplante por parte de Milei y su hermana, Karina, quienes no habrían aceptado el desembarco de dirigentes del PRO para ocupar cargos en su Gabinete.
Este, no habría sido el primer ataque subterráneo a la gestión de Milei, si se tiene en cuenta que hace poco el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, se levantó en una cruzada pública contra el presidente Milei.
Curiosamente, Torres sigue teniendo buen vínculo con Macri.