El gobierno de Javier Milei busca quitarle a la provincia de Buenos Aires la instalación de la planta de GNL, que originalmente tenía todo listo para ser en Bahía Blanca, lugar estratégico por la existencia del puerto y porque allí ya se habían hecho estudios que lo aprobaban.
Sin embargo, con la llega de Milei a la Casa Rosada, el proyecto de la planta de GNL en territorio bonaerense comenzó a agrietarse, principalmente por diferencias políticas. El hecho de que el gobernador Axel Kicillof haya rechazado la adhesión al Régimen de Incentivo las Grandes Inversiones (RIGI), fue la excusa perfecta para que la planta pueda ser instalada en otro territorio, más precisamente en Río Negro.
Ayer, el gobierno salió a darlo por hecho a partir del titular de YPF: finalmente la planta de GNL no estará en la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, hasta ahora no existe un comunicado oficial, así como tampoco se respaldó por parte de la multinacional Petronas, que es socia en este proyecto que busca invertir unos 30 mil millones de dólares. Una de las obras más importantes en la historia del país.
Desde Gobernación consideran que -más allá de las diferencias políticas- la instalación de esa obra majestuosa no tiene demasiado sentido en Río Negro, en donde no existe infraestructura real para emplazarla. A diferencia del puerto de Bahía Blanca, donde hay ventajas enormes. Además, agregan que la instalación de la planta de GNL ya se había firmado el pasado 1 de septiembre de 2022.
Ayer el gobernador Axel Kicillof no dudó en considerar que esta decisión solo busca “castigar a la provincia” y se espera que en las próximas horas haya una conferencia de prensa para tocar el tema. “Cambió el gobierno y Milei empezó a sacarle a la provincia de Buenos Aires, y a las provincias que él considera que son de oposición todo lo que pudo, y está intentando sacarle la planta, sin ningún motivo y sin ninguna razón”, aseguró el mandatario bonaerense.
