Pese a la histórica marcha, el oficialismo no quiso tratar un nuevo presupuesto universitario

El bloque de La Libertad Avanza y muchos diputados del radicalismo y el PRO se unieron para no dar quórum y de esta forma, lograr que la sesión se caiga. El principal objetivo era sancionar un nuevo presupuesto para las universidades, así como una nueva fórmula jubilatoria. 

Las miles y miles de personas que se movilizaron ayer en todo el país, lograron una centralidad en toda la política. El reclamo por la educación universitaria se volvió un tema nacional luego de la foto de la Plaza de Mayo repleta. 

Sin embargo, este miércoles, el bloque del oficialismo y aliados en la Cámara de Diputados, rechazó la posibilidad de tratar un nuevo presupuesto para las universidades. Las cuales, actualmente, funcionan con el presupuesto del 2023, que según los rectores, solo alcanza para el 30% de los gastos totales. 

“La comunidad universitaria que se convocó en una marcha histórica necesitaba una expresión del recinto (de la Cámara de Diputados). Algunos entendieron esa convocatoria pero otros prefirieron estar detrás de las cortinas, en oficinas oscuras negociando con el poder”, salió al cruce el titular del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez.

Los bloques políticos que sí estuvieron presentes y buscaron debatir el nuevo presupuesto fueron Unión por la Patria, el bloque Por Santa Cruz y el Frente de Izquierda y de los Trabajadores. A ellos se le sumaron 15 diputados radicales no alineados con el oficialismo y seis de Hacemos Coalición Federal.

La diputada Cecilia Moreau remarcó que el compromiso de la coalición opositora fue llevar al recinto un proyecto que esté en sintonía con la demanda de ayer. “Este es nuestro compromiso, representarlos en nuestras bancas y acompañarlos en la calle”, dijo y exhortó al Congreso “a abrirse no sólo para tratar los proyectos del presidente Milei”.

Por su parte, el presidente Javier Milei  -quien ayer en plena marcha se burló del reclamo por las universidades en redes- ahora lo catalogó con un “reclamo noble”, pero con “motivos oscuros”. 

Desde sus redes, aseguró que “vimos cómo, una vez más, aquellos que pretenden seguir viviendo a expensas de los argentinos se montaron sobre una mentira para promover sus intereses. Al margen de la discusión acerca de cuál modelo de educación superior es deseable para un país en el que seis de cada diez chicos menores de 14 años son pobres, los mismos vivos de siempre utilizaron el escudo de una causa que suena noble para defender sus intereses de casta”.