¿Ajuste a la política o a los jubilados? lo que se puede venir con Milei

Milei anticipó que habrá seis meses muy duros en el país, pero no explicó qué sectores de la sociedad serán más perjudicados. El ajuste en el gasto político, ese tema tantas veces planteado por el libertario, ¿Es lo único que el gobierno va a recortar? 

Si bien todavía Javier Milei no se sentó por primera vez en el sillón de Rivadavia, el economista libertario y presidente electo ya dejó algunas definiciones de su programa económico.

1). Dijo que los próximos meses “serán muy duros”, en relación a medidas antipáticas y de ajuste.

2). Planteó que la inflación recién bajará considerablemente a casi dos años del inicio de su gestión (es decir para 2026).

3). Dijo puntualmente que se privatizarán algunas empresas del Estado, como YPF, Aerolíneas Argentinas, así como medios públicos; Al tiempo que propuso un modelo de obra pública privatizada “a la chilena”. 

En esta nota, intentaremos ir punto por punto de la mano de un economista. 

La primera contradicción de Milei

Sin siquiera haber asumido, el líder de La Libertad Avanza ya expuso una primera contradicción en materia económica. Milei dijo que la inflación recién bajará en dos años si se empieza a dejar de emitir dinero desde el día uno. Pero el hecho de que -durante el transcurso de dos años- la emisión sea cero y la inflación no baje, explica de antemano que existen otras razones que determinan la inflación en nuestro país. 

“Hay una serie de idas y vueltas en sus declaraciones. Uno no sabe qué creer. Los ministros confirmados se van contradiciendo. El mismo Milei habla que reducción de la inflación demorará entre 18 y 24 meses. En ese sentido te está diciendo que el problema de la inflación no es solamente la emisión”, respondió para ARG MEDIOS, el economista e investigador del CONICET, Facundo Barrera Insua. 

Seguramente, el hecho de estar atado a una deuda inmensa como la que tomó con el FMI allá por el 2018 Mauricio Macri, sea otro de los puntos que condiciona la falta de dólares y por ende, un proceso inflacionario sostenido en nuestro país. Sobre eso, Milei no se ha enfocado ni dado propuestas concretas. 

Seis meses durísimos de ajuste

El segundo punto también inaugura una contradicción que podría desatar un duro conflicto social y político, a poco de que Javier Milei se instale en el poder. Tiene que ver con las advertencias acerca de los “seis meses durísimos” que se vendrán para la Argentina desde el 10 de diciembre. Por qué no, más tiempo. 

Desde la filosofía libertaria, el ajuste se tiene que hacer “en la política”, es decir en el Estado. Pero lo cierto es que aún reduciendo al mínimo ese gasto, el déficit fiscal de nuestra economía seguiría presente. Entonces, ¿Qué es lo que Milei y los suyos plantean ajustar realmente?

“Es imposible reducir el déficit fiscal a partir de la reducción de los gastos que implica la política, esto equivale nada más que el 0,48% de nuestro PBI. El gran gasto del Estado son salarios, jubilaciones, asistencia social e intereses de la deuda”, clarifica Barrera Insua. 

 

-¿O sea que si vos necesitás hacer un ajuste grande para llegar a un déficit cero…?

-Sí, tenés que tocar jubilaciones, programas sociales y asistencia del Estado -responde el miembro de la Sociedad de Economía Crítica.

 

Por todo esto, se espera que en los primeros días, el nuevo gobierno intente reformas estructurales. “Van a intentar ir con un paquete de medidas que tengan reformas estructurales”, considera el economista, algo que -asume- “lamentablemente va a iniciar un período de conflicto social”. 

A todo esto, el nombre para ocupar el ministerio de Economía en el gobierno de Milei, todavía no está dicho. Allí reside la primera interna con el macrismo, que quiere poner a gente con más roce y experiencia en el Estado. 

Qué sería la obra pública “a la chilena”

Por último, nos vamos a centrar en la propuesta de Milei respecto a reducir la obra pública a cero y que la misma pase a estar en manos de capitales privados. Este modelo es aplicado en Chile, luego de varios años de gobiernos neoliberales. Pero, ¿Cómo funciona y cuáles son sus riesgos?

El economista explica que -en caso de que el nuevo gobierno decida ir por ese camino- el Estado abriría el juego para que diferentes empresas constructoras compitan por algunas obras. El problema es que las mismas estarán orientadas a grandes obras públicas y en donde, además, las empresas privadas se podrían quedar con parte de las ganancias. 

“Lo que Milei quiere hacer es dividir la obra pública en dos: la que no es redituable y la que sí. Si vos licitás el gasoducto Néstos Kirchner, por ejemplo, es probable que encuentres un privado que termine ganando esa licitación y se quede con parte de las ganancias”, sostiene Barrera.  

Ahora bien, el segundo -y quizás principal problema- es que de esta forma, las obras públicas más chicas y que cumplen un rol fundamental en las ciudades y provincias, sean descartadas.

“Hacer los caminos rurales en la provincia de Buenos Aires, por ejemplo, no creo que sean mucho del interés privado. Sencillamente porque no es negocio para ellos”, completa el economista. 

Como si fuera poco, a parte de estos tres ejes centrales, Milei también amenazó con derogar la Ley de Alquileres, para reemplazarla por un mecanismo de negociación entre inquilinos y propietarios/inmobiliarias. Lo que no puede traer más que conflicto, porque no estará atado a ninguna normativa y los inquilinos e inquilinas estarán permanentemente en una condición desigual de negociación.

Hoy es 22 de noviembre. Milei ni siquiera asumió, pero ya se avizora un futuro de permanente conflicto en la Argentina.