Justo ahí, en el ministerio de Hacienda, era donde radicaba la tensión máxima dentro del Frente de Todos. Y fue justo allí, donde el problema interno se extendió.
Hasta entonces, el presidente Alberto Fernández nunca había puesto en duda al ministro de Economía, Martín Guzmán, pese a que muchos dirigentes del oficialismo lo apuntaban como uno de los responsables de la situación económica actual.
Pero el presidente no solo lo respaldó, sino fue más allá: le dio más poder a su ministro predilecto y eso encendió todavía más las alarmas dentro del frente de gobierno.
La renuncia del Secretario de Comercio, Roberto Feletti, puso de manifiesto el descontento del funcionario por la absorción que hizo el ministerio que conduce Guzmán respecto al área que se encarga del control de precios.
En su carta de renuncia, Feletti aseguró que “la actitud más razonable y profesional” de su parte era facilitar “que el ministro Martín Guzmán tenga libertad para seleccionar funcionarios y funcionarias que compartan el rumbo definido y el programa fijado”, desnudando sus diferencias con el ministro.
Su reemplazó estará en manos de Guillermo Hang, un economista del riñón de Guzmán, quien hasta entonces se desempeñaba dentro del Banco Central del país.
Por ahora, la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner no se pronunció sobre el hecho, pero lo cierto es que en esa puja por determinar un rumbo económico, el presidente Alberto Fernández avanzó sin medir el termómetro de la interna.
Junio, con aumentos en gas y luz
Ahora, el ministro Martín Guzmán se erige como el hombre con más poder dentro del gabinete del gobierno nacional, en vísperas de un momento clave para la economía del pueblo argentino. En las próximas semanas se deberá definir los aumentos de gas y luz, en el marco de una acelerada inflación que golpea los bolsillos de las mayorías.
Luego de las audiencias públicas, se estima que las nuevas tarifas rondarán un aumento del 20 por ciento para gran parte de los usuarios del país, a partir del 11 de junio. Para eso solo resta que los Entes reguladores oficialicen los aumentos, pero tanto el Ente Nacional Regulador de Gas (Enargas) como el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) están en manos de funcionarios que responden al kirchnerismo.
Estos se quejan de que el ministro Guzmán pasó por alto los informes que presentaron los Entes advirtiendo de un impacto negativo respecto a los nuevos aumentos. Pero la decisión de que las tarifas aumenten al menos un 20 por ciento, ya estaría tomada. Más leña al fuego.
Realidad paralela
Sin embargo, existe un hecho que parece haber sido ignorado por todos los sectores que conforman el Frente de Todos y que presenta un nuevo dilema sobre cómo evitar más aumentos y ajustes para una población económicamente golpeada: Las exportaciones de este 2022 marcan un récord histórico e ingresos millonarios para empresarios y el Estado.
Según información oficial de Cancillería Argentina, las exportaciones argentinas totalizaron en abril US$ 8.327 millones, “con un crecimiento interanual del 35,6%, que fue impulsado por un aumento de 23,7% en precios y 9,6% en cantidades”.
De hecho, el valor exportado de abril representa “el mayor registro histórico para este mes en la historia”. Según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), los primeros cuatro meses del año acumulan un total exportado de US$ 27.681 millones, por lo que 2022 se mantiene en niveles récords.
“En ese periodo, las exportaciones crecieron 28,5% con respecto al primer cuatrimestre del año pasado y superaron en 14% el récord previo de enero-abril de 2012. En cantidades exportadas, alcanzó el segundo mayor registro de la historia, solo superado por el mismo período de 2008”, destaca el informe.
Es decir, un verdadero mundo paralelo respecto a lo que pasa dentro del país, con niveles de pobreza que superan el 40% y con una inflación interanual que está camino a ser mayor a los 60 puntos, una de las más altas de la historia.
¿Podrá entonces el gobierno evitar una ruptura y volver a encontrarse a partir de proyectos con orientación popular? Para eso, será importante que el presidente concentre el poder en un solo ministro y el resto del oficialismo acompañe.