Las organizaciones de trabajadores nucleados en diversos gremios marcharon ayer en todo el país en conmemoración a los 70 años del fallecimiento de Eva Perón. Casi en simultaneo el gobierno nacional anunció el desdoblamiento del dólar para el sector agroexportador, al que el propio presidente Alberto Fernández había tildado de “especuladores”.
El momento económico que atraviesa el país es delicado. La inflación del mes de julio ya se anticipa muy alta y las expectativas de devaluación afectaron a los precios de los productos de la canasta básica. En ese marco, aumentan las voces desde las organizaciones gremiales y movimientos sociales, quienes reclaman al gobierno nacional medidas que tiendan a redistribuir los buenos números de la recuperación económica y las ganancias extraordinarias que se produjeron con el contexto de la guerra en Europa.
Por caso el referente gremial de la CTA Hugo Yasky expresó ayer antes de la marcha en homenaje a Evita que “tenemos que ir hacia un salario básico universal”, pese a que hoy el trámite parece complicado, y que hasta ahora la ministra de economía Silvina Batakis no ha dado señales de redistribución a los sectores del pueblo trabajador.
En una línea similar se expresó el secretario adjunto del Sindicato de Camioneros y cotitular de la CGT, Pablo Moyano, en un discurso durante el homenaje a Eva Perón en el centro de la Ciudad de Buenos Aires: “Esta no es una marcha contra el Gobierno, es una marcha defendiendo al presidente y a la vicepresidenta” y agregó que “los antipatria son los que quieren desestabilizar al Gobierno para venir con la reforma laboral“.
La central gremial de los trabajadores ratificó esta semana una marcha para el feriado del 17 de agosto con la consigna “contra la inflación y los especuladores”. Dicho de otro modo, una marcha de apoyo al gobierno, pero sin exigir medidas concretas a la propia gestión.
Del lado de los movimientos sociales el reclamo es por el Salario Básico Universal y por el aumento de la recaudación mediante aumento de impuestos a sectores más pudientes, tales como la suba de retenciones. Así lo expresó en repetidas ocasiones el dirigente social Juan Grabois.
En esa línea, y en una postura más crítica, el dirigente gremial Pablo Moyano afirmó que uno de los errores de Alberto Fernández “fue el no tener la fortaleza de haber sentado en una mesa a los empresarios para decirle que se dejen de joder con el salario de la gente”.
