El país casi paralizado: se suman las huelgas de universitarios y cortes de la UTEP

Los impulsores de la huelga de transporte de este miércoles aseguran que “va a ser el inicio de algo mucho más importante" y ya le ponen presión a la CGT. Por su parte, el gobierno nacional salió a perseguir a dirigentes gremiales. 

Este miércoles 30 de octubre, todo el país estará casi paralizado debido a un contundente paro de transportes, que incluye trenes, aviones, taxis, subte y transporte fluvial. Por su parte, el gremio de la UTA decidió diferenciarse y parará mañana, por lo que este miércoles el único servicio de transporte serán los micros, pero no mañana jueves.

Sin embargo, la huelga de transporte contará con otros actores de peso: habrá paro de estatales, de docentes bonaerenses y docentes y no docentes universitarios de todo el país.  Además, la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) desplegará más de 500 cortes en todo el país.

Si bien todos los sectores que hoy confluyen en la huelga tienen diferentes motivos, hay uno que unifica y se impone por sobre los reclamos particulares: frenar el plan de ajuste del gobierno.

El titular de Camioneros, Pablo Moyano, aseguró que la jornada de este miércoles “va a ser el inicio de algo mucho más importante”.  A su vez, en diálogo con la AM 750, aclaró que también servirá para que el resto de los gremios “tomen una medida más contundente en noviembre”. El mensaje de Moyano impacta de lleno en la conducción de la CGT, de la cual él es parte y crítico. 

Por esta razón, el gobierno de Javier Milei toma nota y trata de evitar que la cosa recale. Ayer, en altoparlantes de estaciones como la de Constitución y Retiro se pudo escuchar un mensaje grabado que apuntaba contra la huelga y llamaba a “denunciar” si los gremios “obligaban a parar” a algún trabajador. 

La polémica estratégica  -que se parece mucho a la persecución política-  exponía puntualmente a los dirigentes Moyano y Pablo Biró, de Aerolíneas Argentinas.  También la replicó desde la app “Mi Argentina”.