Javier Milei habló ante un Congreso semivacío y hace una audiencia televisiva realmente baja, el pasado domingo a las 21 hs. El objetivo del presidente era presentar el Presupuesto 2025 y remarcar que el gobierno nacional está comprometido a muerte con reducir el déficit fiscal.
De hecho, en palabras de Milei se pudo oír que “cualquier ley que ponga en peligro el equilibrio fiscal, será vetada”. Algo que sin dudas, puede ser un aumento a los jubilados, a la educación o a la salud.
Sin embargo, el presidente dejó una frase que encendió todavía más las alarmas y generó una reacción en cadena por parte de los gobernadores. Incluso, de aquellos aliados al gobierno nacional.
Dijo que la tarea de ajuste por parte de la administración nacional ya estaba hecho y que ahora recaía en las provincias, la necesidad de ajustar “60 mil millones de dólares”.
Pese a que el día siguiente, el diputado por La Libertad Avanza, José Luis Espert salió a aclarar que en realidad se trataba de 20 mil millones de dólares y también a pesar de los esfuerzos del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, por contener la bronca de los mandatarios, las palabras de Milei hicieron efecto.
“La Provincia no participará del ajuste que propone el presidente Javier Milei. Creemos lo contrario y no por una cuestión ideológica, sino porque viajamos por el interior y la gente no pide que le pongamos un cepo al Estado, pide más patrulleros, medicamentos, insumos, equipamiento, hospitales, escuelas, rutas. No ajustaremos porque Axel Kicillof fue reelegido para fortalecer el Estado y asegurar derechos”, dijo ayer el ministro de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, Carlos Bianco.
Al unísono, se le sumó la palabra del gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, quien viene acompañando al gobierno nacional en muchas políticas, pero en este caso no le quedó otra opción que distanciarse.
“Preocupa un poco que se le siga pidiendo esfuerzo a las provincias”, expresó el primer mandatario provincial.
“No corresponde que nosotros hagamos más esfuerzo porque a Nación no le debemos nada, y Nación nos debe mucho a la provincia de Santa Fe, y nosotros vamos a continuar con mucho respeto, pero con mucha firmeza, el reclamo ante la Corte Suprema de Justicia de Nación”, cerró después.
En este sentido, estimó que la deuda previsional es de “alrededor de 700 u 800 mil millones de pesos, que se incrementa todos los meses”, a partir de la decisión de dejar de enviar desde Nación las transferencias automáticas para el saldo de las cajas de jubilaciones de trece provincias que no transfirieron sus sistemas, entre ellas Santa Fe.
A los rechazos de una de las dos provincias más importantes, se le sumaron declaraciones de funcionarios de segunda línea en varios otras provincias. Por lo que ya se descarta que la intención de ajuste pueda realmente imponerse desde los territorios, como pretende Milei.